La peor amenaza es una posible sanción de la UEFA

Florentino y Laporta, protagonistas del clásico

Florentino y Laporta, protagonistas del clásico / EFE

J.Mª Casanovas

J.Mª Casanovas

Solo faltaba que el Real Madrid se personara en la causa. Florentino Perez, presionado por los socios, pasa al ataque. Tras el durísimo escrito de la Fiscalía, el Caso Negreira se convierte en un problema envenenado para el Barça. Una mancha terrible de futuro complicado.

Un mes después de que apareciera a la luz, la polémica no tiene fin y el daño reputacional es enorme. La denuncia de la Fiscalía ha llegado al Juzgado de Instrucción número 1 de Barcelona y está pendiente de que el juez Aguirre la acepte para iniciarse el proceso penal. A partir de aquí, el trámite puede alargarse mínimo un año y máximo dos. Un camino largo, farragoso y complicado que generará inquietud y temor. El panorama es preocupante desde el momento que la Justicia en este país es lenta, imprevisible e implacable.

Lo único que está claro a día de hoy es que a nivel deportivo el tema ha prescrito y en consecuencia no puede haber sanciones. Por dicho motivo no ha actuado la Federacion Española de Fútbol y lo único que puede hacer es personarse en la causa abierta en el Juzgado. Una acción que la Liga de Tebas ya ha anunciado que realizará. Otra cosa es el proceso penal que prescribe a los cinco años y se ha activado ahora con una denuncia por presunto delito continuado de corrupción entre particulares, administración desleal y delito de falsedad.

Al margen del proceso penal que se iniciará en España, en el Barça preocupa la reacción de la UEFA que hasta el momento ha mantenido silencio oficial mientras su Comité de Etica y Disciplina elabora un dossier de la situación. En el organismo europeo hay sorpresa e indignación por la gravedad del caso ya que consideran que repercute negativamente en el prestigio del futbol europeo. La posibilidad de que la UEFA actúe contra el Barça no hay que descartarla máxime cuando las relaciones no son buenas ya que el club blaugrana sigue apoyando la Superliga. De todos modos, lo normal en estos casos es que UEFA espere a la sentencia firme para que el Comité Ejecutivo tome una decisión. Sin embargo, el reglamento interno contempla la posibilidad de imponer una sanción si tuvieran la certeza de que el club directa o indirectamente ha estado implicado en cualquier actividad cuyo objetivo fuera preparar o influenciar el resultado de un partido. En tal caso, sin esperar al desenlace del caso, el Barça podría ser sancionado sin participar en la próxima edición de la Champions.

Mientras tanto, el Barça reitera su honradez y honorabilidad ante la campaña de desprestigio que sufre. Cada día que pasa parece mas necesario que el club explique detalladamente los servicios contratados a Negreira y aporte soportes creíbles del trabajo desarrollado. Es la  manera de demostrar que no participó en corruptelas. Alargar el silencio sin aportar pruebas va en perjuicio del club.