Pedri y Pau Gasol, las dos caras de la moneda

Pau Gasol

Pau Gasol

Lluís Mascaró

Lluís Mascaró

Pedri solo tiene 18 años. Cuando nació el canario, Pau Gasol (que tiene 41) ya estaba jugando su segunda temporada en la NBA con los Memphis Grizzlies. Ayer, los dos deportistas del Barça fueron protagonistas, por diferentes motivos y con diferentes sensaciones, de una jornada histórica en los Juegos de Tokio’2020. Pedri se clasificó (junto a los también blaugranas Mingueza y Eric Garcia) para la final olímpica de fútbol, asegurándose la medalla de plata y dispuesto a luchar por la de oro, casi tres décadas después de aquel triunfo de la ‘generación Cobi’ en Barcelona’92. Pau Gasol (junto a su hermano Marc) vio como las opciones de subir al podio en la competición de basket se esfumaban tras caer con honor ante Estados Unidos. Pedri, que es el futbolista europeo que más partidos ha disputado esta temporada (lleva 72 y puede alcanzar los 73 si juega la final), está al inicio de una carrera deportiva que se antoja que puede ser más que brillante. Pau Gasol, por su parte, anunció tras la derrota que abandonaba la selección (y, probablemente, el basket) con un palmarés extraordinario: 11 medallas con España en Europeos, Mundiales y Juegos, tres Ligas y una Copa con el Barça y dos anillos de la NBA con los Lakers. De leyenda. 

Los caminos de estas dos estrellas blaugranas del deporte se han cruzado en el ‘supermartes’ olímpico, una intensa mañana televisiva en la que la delegación española sumó dos nuevas medallas: la plata de la mítica Teresa Perales en piragüismo y el bronce del mahonés Joan Cardona en la clase Finn de vela. Ya son 9 metales (10, si contamos el seguro de fútbol) y aún pueden caer más en vela, atletismo, waterpolo, balonmano... Pau Gasol, lamentablemente, se ha quedado sin premio en sus quintos y últimos Juegos, pero su excepcional trayectoria avala su condición de mejor jugador de basket español de la historia. Después de anunciar su retirada de la selección falta por ver si seguirá o no en el Barça la próxima temporada. Por su personalidad y su experiencia sería, sin duda, un buen apoyo para Jasikevicius. Y aún podría optar a ganar el único título que le falta en su espectacular palmarés: la Euroliga.