Pedri-Dembélé: el futuro y el pasado

Fichar caro no siempre sale bien. E, incluso, puede convertirse en un problema a la larga. Los ejemplos de Pedri y Dembélé deberían marcar la línea de futuro del Barça en una economía cada vez más complicada y que exige atinar en el mercado para reforzar y rejuvenecer la plantilla. Ya no hay duda de que la incorporación de Pedri es un acierto a apuntar a los responsables de su contratación. Por un precio módico, el club blaugrana se ha hecho con un futbolista técnicamente exquisito, con claro estilo blaugrana y que apunta a proyecto interesante para que pueda ser importante en el equipo a medio e, incluso, corto plazo. Su partido en Getafe fue esperanzador, pero sobre todo sus ganas de triunfar, su humildad y su profesionalidad hacen vislumbrar que acabará siendo un activo importante. Pedri es del tipo de inversiones con riesgo mínimo que pueden acabar siendo un pelotazo deportiva y económicamente. Solo por su actitud en el campo, ya se ve que el chico pinta bien.

Si Pedri es el futuro del Barça, Dembélé puede ser pasado en muy pocos meses. El francés, que llegó por más de cien millones de euros en el verano loco de la venta de Neymar, sigue sin encontrarse en el club y en el equipo. Nadie duda de que no le ponga ganas, pero sus lesiones, sus despistes tácticos y su forma de jugar no casan demasiado en este club. Invertir tal cantidad de dinero en un chico tan joven es jugar con fuego. Dembélé apuntaba a crack, pero el Barça ahora solo piensa en cómo recuperar lo que pueda del capital invertido. Pedri y Dembélé, dos ejemplos opuestos que deberían abrir una reflexión para que nunca más se cometan errores que comprometen el futuro.