París capital Barcelona

El Camp Nou vivió un delirio futbolístico

El Camp Nou vivió un delirio futbolístico / AFP

Xavier Sardà

Xavier Sardà

Josep y Carlos andan flotando. Todos necesitamos pellizcarnos de vez en cuando para comprobar que todo esto no es un sueño. Porque lo cierto es que es un sueño hecho realidad. Josep lo vivió en el Camp Nou, y Carlos en la distancia televisiva, pero el miércoles estábamos todos juntos.

Carlos.- ¡Hombre Josep!… ¿qué pasa?... ¿qué tal?

Josep.- gfggglo.

Carlos.- ¿Qué dices?

Josep.- ghhooolag

Carlos.- ¿Estas afónico?

Josep.- fggrgo. Hi.Mpo.mpo.

Carlos.- ¿Qué, fuiste al campo?

Josep.- Hi.

Carlos.- Y te has cascao la voz…

Josep.- Hi.

Carlos.- (al barman) Déjame un papel y un boli. Toma, escribe aquí.

Josep.- (escribiendo) Fue la ostia.

Carlos.- Hostia va con 

hache.

Josep.- (escribiendo) Déjate de hostias. A ver si te pego una. ¡Partidazo!

Carlos.- Bueno, vienes a las mías. Los milagros existen a pesar de los cenizos como tú.

Josep.- (escribiendo) Blablablá… mejor sería que estuvieses afónico tú. 

Carlos.- Si Maradona tiene la iglesia maradoniana, este partido podría ser el principio de una nueva religión: “La remontada del sexto gol”. Aquello de “estando once apóstoles en el campo, se les aparece el todopoderoso dios París y le dan sopas con honda”. Según algunos hasta tuvimos el penalti de Dios.

Josep.- ¡ghhhggtas!

Carlos.- ¿Qué dices?... escríbelo.

Josep.- (escribiendo) Que estuve en Canaletas.

Carlos.- ¿Después del campo te fuiste a Canaletas?... no tendrás voz hasta el año que viene. ¿Te has tomado algo?

Josep.- (flojito y con un hilo de voz). Nunca había visto un partido tan acojonante. 

Carlos.- Una locura Josep. (al barman) ponme una caña para mí y una infusión calentita para este.

Josep.- jcagna.

Carlos.- ¿Qué?

Josep.- ¡Una caña, collons! ¿Lo del Sergi Roberto, qué? Es que cuando pasa, es que no te lo crees… el Camp Nou una olla a presión. Hasta lloré, tú.

Carlos.- El tema es que además jugaron bien y sin complejos. Solo así se podía salir a por todas.

Josep.- ¿eyeggnbar?

Carlos.- ¿Qué?

Josep.- (poco a poco) ¿Y el N-E-Y-M-A-R?

Carlos.- Brutal. Era como si jugara por primera vez y tuviera que demostrarlo todo. Fueron a por él, pero nanai. Una furia que estaba en todas partes. Ahora me alegro del desastre de París, para haber vivido lo del miércoles. 

Josep.- Que no se vaya el fsrque.

Carlos.- ¿Quién?

Josep.- Luis Enrique.

Carlos.- Hace un mes tú le dabas por amortizado y qué fatal. Y ahora queréis que se quede.

Josep.- Eres malo, sabes que no tengo voz… Vaaale, cambio de opinión.

Hay días históricos que se recordarán durante muchos años. El miércoles este país estuvo unido compartiendo una alegría inmensa. No es tan fácil. Disfrutemos. París capital Barcelona.