Opinión
De pájaras y pajarracos
Las intrahistorias de un equipo obsesivo ganador y de una televisión tan obsesiva como ridícula

Fermín, Pedri y Gavi forman parte de un centro del campo mágico / Dani Barbeito
Esperemos que no tengamos que recordar la Liga 24-25 como la de las dos pájaras, ese término, más ciclista que futbolero, explica que el Barça ande rezagado (siguiendo con el argot) en la lucha por el título. ¿Estamos haciéndoles la goma al Atlético y el Real? Es muy difícil calificar lo que nos pasó en ese noviembre y diciembre infaustos, qué lástima esos dos partidos perdidos con rivales menores en casa; aunque qué le vamos a hacer, a este grupo, empezando por el entrenador y siguiendo por la mayor parte del equipo, se lo empezamos a permitir todo, por lo mucho que nos hacen gozar en la mayor parte de encuentros.
La cadencia del equipo roza la demencia del desenfreno con el que juegan, marcar se ha vuelto en una obsesión, casi un trastorno mental, como la presión tras pérdida que, no solo se ejerce, sino que acaba por trastocar al rival. Ver a Raphinha correr, persiguiendo a defensas, es sencillamente un escándalo, emula al perro de Hernán Casciari; por no hablar de los dos kamikazes del centro del campo, Gavi o Fermín, que van al bulto con una contundecia propia de un panzer, siendo dos pequeñines. Al fin y al cabo, ello relata la confianza con que todos creen en el método, que se aplica por igual con balón, al más puro ejemplo del guardiolismo, y sin balón, haciendo un simil al luisenriquismo.
No todo es optimismo, también tenemos a un Araujo que no acaba de entender el libro del fuera de juego, ya van sendos errores en repetidas titularidades. El charrúa está muy debajo en prestaciones de Íñigo y Cubarsí, tanto con balón (qué drama el suyo para darle fluidez y salida al juego) o sin él (la línea con él se desdibuja, no acompasa el paso adelante con el resto de compañeros). Después está el tema de Ansu Fati, alguien que ha decidido ser un exjugador, a pesar de que le han comunicado que no tendrá minutos, ni de banquillo, su decisión de no marchar es una lástima para el club, pero más para él mismo. El chico no debe estar muy bien aconsejado o su lucidez fuera del campo apunta a ser la misma que demuestra dentro del mismo.
Por último hablaré de pajarracos, lo de Real MadridTV no puede calificarse de otra forma. Barça TV tampoco es un oasis, hay que reconocerlo, pero hay una distancia. Una cosa es tener medios afines a los que se subvenciona para que sean el altavoz de un posicionamiento determinado, eso ha pasado siempre, y la otra es que el medio oficial de un club arremeta de forma desmedida y continuada contra todos: árbitros, rivales, entes federativos y la propia liga.
Un despropósito que atenta contra el periodismo, pobres los que se ven obligados a ganarse la vida en ese pseudomedio, y contra la marca del fútbol español. El Madrid, después de veintitrés jornadas de competición, ve cómo le pitan el primer penalti en contra y la lía parda. Antes el club blanco era un ejemplo de señorío, hoy ve cómo incluso el presidente del Sevilla, un club amigo, tiene que salir a decir basta. Algo debe hacerse, esto no puede seguir así, es un despropósito.
- El Chelsea se entromete en el fichaje de Huijsen por el Real Madrid y el jugador 'hace equipo' con Asencio
- ¡Oficial! La IFAB anuncia los cambios de las reglas de fútbol para la próxima temporada
- El próximo capitán del Barça de Flick
- Messi responde a Raphinha
- Así se reestructuraría el contrato de Ansu Fati con la 'Fórmula Umtiti
- Lewandowski regresa muy enfadado
- La peor noche para Raphinha
- Arsenal - Real Madrid, en directo: alineaciones, horario y dónde ver | Champions femenina