El pacto de Laporta con las 'vacas sagradas'

Messi y Laporta, tras ganar la Copa del Rey

Messi y Laporta, tras ganar la Copa del Rey

Lluís Mascaró

Lluís Mascaró

El Barça sigue esperando a Messi. El crack blaugrana todavía no ha dado respuesta definitiva a la oferta de renovación que le hizo Laporta. Pero el presidente insiste, una y otra vez, en que se siente optimista. Muy optimista. La buena sintonía entre Laporta y Messi ha sido clave para que las negociaciones entre ambas partes hayan sido fluidas. Sin tensión. Sin reproches. Asumiendo todos la situación real del club. Nada que ver con lo que sucedió en la última etapa de Bartomeu. El nuevo presidente saca pecho de ello cuando se le pregunta qué ha cambiado para que la relación sea tan plácida: “Yo”, responde con una sonrisa. Y aunque pueda sonar prepotente, es verdad. Laporta ha conseguido dar un giro radical en la comunicación con Leo y el resto de la plantilla. La mayoría de los jugadores querían su victoria en las elecciones. Porque lo consideran uno de los suyos: próximo al vestuario, donde entra sin tener que pedir permiso. La intención del presidente de ejecutar una renovación profunda preocupó a las ‘vacas sagradas’. Pero Laporta ha moderado la ‘revolución’ a cambio de una importante rebaja de sus salarios. Ese es el pacto. Prefieren cobrar menos antes que irse del Barça. 

Messi y Piqué han sido de los primeros en aceptar la drástica reducción de sus fichas. Harán lo mismo Busquets, Alba o Sergi Roberto. Nadie quiere abandonar el club blaugrana. Y menos, futbolistas veteranos (unos más que otros) que saben perfectamente que no estarán mejor en ningún otro club. Laporta también utiliza esa baza a su favor. Incluso con Messi, que podría irse al Manchester City o al PSG, pero que realmente no desea moverse del Camp Nou. El crack argentino espera que el proyecto deportivo sea lo suficientemente atractivo para justificar su renovación. Y acepta la ‘fórmula imaginativa’ que le ha propuesto el presidente para cobrar en cuatro años lo que tendría que cobrar en dos. Y es que fuera del Barça hace mucho frío. Mucho… Por eso Laporta sigue esperando a Messi, aunque ya conoce cuál será la respuesta...