Otoño caliente en los despachos

Leo en el diario digital Vozpópuli que la CE estima que Ruiz Gallardón debió compensar al Madrid con 4,2 millones de euros y no con 22,6 millones. Ya veremos cómo continúa este proceso que anda entre manos del Tribunal de Justicia de la UE; será interesante ver si todo cae en saco roto o bien en un episodio de amiguismo político, de esos que tanto abundan en este país del “yo te doy por aquí y tú me devuelves por allá”. Como es preceptivo, el Real Madrid ha recurrido la sentencia, que dice encontrar pruebas que suponen una ayuda estatal ilegal al equipo del presidente Pérez. Mientras quedo a la espera de la sentencia definitiva, leo también la deshonrosa brega entre el presidente de la Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales y el presidente de La Liga, Javier Tebas. En este país de bandos ya no basta con disputar las rivalidades futbolísticas en el campo sino que también se disputan en los despachos. El motivo: disputar algún partido del campeonato de Liga a miles de kilómetros por razones claramente económicas. Lo de Rubiales y Tebas parece ser que viene de lejos: no se gustan, y existe una lucha de egos evidente. Las frases de Rubiales diciendo que Tebas no le ha llamado o que no ha hablado antes con quien debía hacerlo, marcan un resquemor que, me temo, irá en aumento. A ver quién meará más lejos.

Por otra parte, me dicen que se preparan más candidaturas de las ya sabidas para concurrir a las futuras elecciones de can Barça. ¡Al loro! Así que, también en el fútbol, el otoño se presenta caliente, caliente.