Osasuna intimida lejos del Sadar

Un gran visitante 

Muy buena temporada del Club Atlético Osasuna, clasificado en mitad de la tabla y con el objetivo de la salvación asegurado, pues está más cerca de las plazas europeas que no de las de descenso. La gran sorpresa y buena noticia para los de Arrasate que, por cierto, acaba de renovar su contrato, es su rendimiento como visitante. En todas las campañas era su estadio el principal aliado de sus victorias, en cambio esta temporada se ha convertido en uno de los mejores conjuntos por sus resultados lejos del Sadar.

Es el sexto mejor equipo como visitante habiendo ganado ni más ni menos que 6 de los 13 partidos que ha disputado lejos de su estadio, prácticamente la mitad. Además todos sus números son mejores cundo juega lejos de Pamplona: gana más partidos, marca más goles y encaja menos. Sorprendente en ese aspecto la temporada de los de Arrasate, que le convierten hoy en un peligroso rival. Más aún, si el Barça no saca provecho de la experiencia frente al Galatasaray y vuelve a regalar el primer tiempo, saliendo con poca intensidad y lentitud en la circulación del balón, ya que enfrente va a tener probablemente al conjunto más intenso y agresivo en la presión de la competición.

¿Cambio de dibujo?

De forma habitual, Osasuna plantea un dibujo con el 4-1-4-1 con Torró como pivote defensivo por delante de la línea defensiva de 4 efectivos. Pero en alguna ocasión, no demasiadas, Arrasate, en función de las características del rival, se ha decantado por un cambio de dibujo introduciendo la defensa de 3 centrales y 2 carrileros. Ante el Barça, ese podría ser el dibujo táctico para contrarrestar al conjunto azulgrana. De ser así, Sergio Herrera seguiría en portería. Se trata de un meta muy dinámico, que le gusta acompañar al equipo cuando ataca, adelantándose en ocasiones excesivamente. Nacho Vidal y Manu serían los carrileros, ambos con vocación de incorporarse y darle profundidad al ataque, aunque pueden sufrir en el 1 contra 1 con los extremos del Barça en defensa.

David García lidera la zaga con Juan Cruz en el flanco izquierdo y, probablemente, Aridane en el derecho. Gran juego aéreo, sobre todo de David García, muy peligroso a balón parado en los córners. Como ya hemos citado, Torró se mantiene posicionalmente por delante de los centrales y le acompañan un muy dinámico Moncayola, con gran recorrido, y Brasanac, llegador al remate. Rubén García por la izquierda y en ocasiones incluso convertido a segunda punta, mientras la referencia arriba estará entre Kike García y Budimir, ambos un incordio constante por su espíritu de lucha, la disputa de cada balón dividido y su solvencia para proteger y utilizar su envergadura.

En el caso de seguir apostando por el dibujo habitual con cuatro defensas, la única novedad sería desvelar quién sustituirá al sancionado Chimy Ávila en la banda derecha, donde Javi Martínez, Kike Barja o incluso Roberto Torres tendrían posibilidades. Independientemente del sistema y del once titular, lo que garantiza el conjunto de Arrasate es intensidad, presión, competividad y no arrugarse en ningún momento del partido. El Barça deberá estar con los ojos muy abiertos para no llevarse de nuevo otra sorpresa como la del jueves pasado frente a los turcos. El equipo está avisado y falta saber si ha aprendido la lección europea.