Ojalá diera el nivel de Hristo

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La Roma, primera víctima de Malcom. / sport

Francesc de Haro

Francesc de Haro

El Dream Team marcó un época en el FC Barcelona. De la mano de Johan Cruyff, el equipo de los Bakero, Txiki, Laudrup, Koeman... devolvió la alegría a una afición acostumbrada a celebrar una Liga cada catorce años. Su fútbol vistoso, preciosista, elegante, enamoró a propios y a extraños. Todos se rindieron al Dream Team que, con el paso de los años, fue considerado uno de los mejores equipos de la historia del fútbol.

Aquel equipo se fue creando, cocinando poco a poco, con contratiempos, superando obstáculos. Pero el salto definitivo llegó con el fichaje de Hristo Stoichkov. Poco se sabía de un búlgaro que acababa de ser Bota de Oro pero que no había jugado en ningún ‘grande’ europeo. Pero ese jugador desconocido para la inmensa afición barcelonista le dio al equipo una garra, una rebeldía, un espíritu del que carecía. 

Justo con su llegada empezaron a caer los títulos. Cuatro de Liga consecutivos y la primera, la ansiada Copa de Europa de Wembley. Hristo, con sus pros y sus contras, se ganó el cariño de una afición. Ojalá Malcom pudiera seguir su camino. Ojalá algún día podamos escribir que Malcom también ha hecho historia en el Barcelona y se ha ganado el cariño de los aficionados.