Los nuevos Messi, Iniesta y Xavi

El Barça tiene un estilo y en ese estilo sólo caben determinados futbolistas. Por ser tan genuino y exigente, este estilo hay que practicarlo y entenderlo desde lo más pronto posible. Para eso está la cantera. Y donde la cantera no llegue, están los fichajes. Pero eso sí, los fichajes han de ser determinantes. El dinero hay que invertirlo en talento puro, el más desequilibrante para aquellos puestos que la cantera no pueda cubrir de forma suficiente. No hay más, así de sencillo. Esta es la fórmula que lleva directamente al éxito, precisamente lo que no se ha hecho en los últimos años y por eso se ha llegado a la crisis actual y a la necesidad de reconstruir el equipo. Para entendernos, el Barça tiene la obligación de crear, forjar o detectar a los nuevos Messi, Iniesta y Xavi. También Busquets, Puyol o Valdés, pero el triángulo mágico es esencial para que la rueda siga girando. 

No es tan difícil

Por primera vez en cuatro años parece que se está en el camino correcto. Messi es irrepetible, eso seguro. Pero Ansu Fati se le parecerá bastante, ya lo verán. Es una suerte que no haya que ir al mercado a pagar lo que no tiene precio y que este nuevo Messi pueda crecer en sus primeros años como profesional junto al Messi original. Todo apunta a que el nuevo Iniesta será Pedri, que no ha salido de la cantera pero que ha sido un grandísimo fichaje. Otra vía a seguir, detectar antes que nadie el talento que hay en el exterior para no tener que pagarlo a precio de oro o, directamente, quedarse sin él. Para el nuevo Xavi, posiblemente se necesitará una doble carambola en la que se incluye el relevo de Busquets. De Jong se acerca a los dos, pero, claro, si hace de uno no puede hacer del otro. Mientras Busi aguante, de Jong y Pedri aseguran dos interiores de altísima calidad. Y a la par, hay que acompañar a Ilaix para que llegue al nivel que se intuye y entonces De Jong releve a Busquets. Como ven, los jugadores están y las perspectivas son inmejorables. Y luego, otro relevo innegociable: el nuevo Suárez. Aquí es donde habrá que rascarse el bolsillo. Haaland, sin ninguna duda. Es el goleador de la próxima década y ha de jugar en el Barça. Con eso y Eric Garcia atrás, de momento bastará. Tampoco es tan difícil.