El muro de Londres

Simeone, durante el Chelsea - Atlético

Simeone, durante el Chelsea - Atlético / AFP

Rubén Uría

Rubén Uría

Melville escribió: “Hay dos lugares en el mundo en los que una persona puede desaparecer: los mares del sur y Londres. El Atleti jugó en Londres y cuando tenía que aparecer, desapareció. Tras el plan conservador de la ida, el Atleti debía apelar a la épica en Londres. Simeone volvió al 4-4-2 de comienzos de temporada y sacó la artillería pesada: Joao Félix (que debía sumar voluntad a su talento), Marcos Llorente (fuente imparable de energía) y Luis Suárez (que buscaba cortar su sequía como forastero en Champions).

Marcar dos goles no era un objetivo imposible, pero enfrente había un señor equipo. El Chelsea de Tuchel, que desde que llegó el alemán, no conoce la derrota. El Chelsea fue más sólido, más seguro, más rápido y contundente en ambas áreas. El Atleti empezó con alto voltaje, el gol de Ziyech le desbravó y al descanso, Simeone pensó que necesitaba un plan ‘B’. Dicho y hecho. El Cholo agitó la coctelera. Metió a Lemar, Dembélé, Correa y Hermoso, pero no pudo superar el muro azul. El arbitraje, hogareño, tampoco ayudó. Ignoró un penalti claro sobre Carrasco en el primer tiempo y mandó a la ducha a Savic con roja directa. Emerson hizo más grande el boquete. Todo lo que pudo salirle mal al Atleti en Londres, le salió. Romo ante el muro de Londres, el Atleti ahora sólo tiene una bala en la recámara, la Liga.

BAYERN DE ESTRATOSFERA

Con permiso del sofisticado City, un equipo de autor que ha blindado su retaguardia y está repleto de talento, el Bayern de Múnich es, con diferencia, el mejor equipo de Europa. No es imbatible, ni tampoco invencible, pero si buscas en ‘Google’ favorito para ganar la Champions, te aparece una foto del ogro bávaro. Si en la ida destrozó a la Lazio, en la vuelta, a medio gas, el cuadro teutón levantó el pie del acelerador. La sensación de superioridad que inspira el Bayern, vigente campeón de Europa, es abrumadora. Nombre por nombre, inspira miedo. Quizá en cuartos se humanice, pero ahora mismo, parece en la estratosfera.