Mucho bla, bla, bla y poco tiki-taka

Coutinho 'explotó' tras marcar contra Ecuador

Coutinho 'explotó' tras marcar contra Ecuador / AFP

Joan Mª Batlle

Joan Mª Batlle

Nada nuevo tras la rueda de prensa de Albert Soler y Robert Fernández para intentar atajar la frustación de los aficionados y las críticas absolutamente generalizadas por los fichajes que han llegado y, sobre todo, por, los que no han llegado. El argumento único fue la responsabilidad en la administración de los dineros del club, de modo que se dieron cifras de las negociaciones. El Liverpool pedía 200 millones por Coutinho. Efectivamente, hubiese sido una irresponsabilidad fichar al brasileño por esta cantidad. Pero, claro, el Liverpool no tardó en desmentirlo y nos volvimos a quedar con la duda. Más dudas: ¿Cuándo se enteró el Barça de que Neymar podía marchar? Por supuesto, aquí los que desmienten son ellos, los ejecutivos, porque a los directivos no se les ha visto el pelo. Minguella, mentiroso. ¿Sí?, ¿seguro? No se puede justificar el resultado de un mercado de fichajes con medias verdades, desmentidos, sospechas y victimismos, como el de que las condiciones del negocio han cambiado. ¡Toma, claro que han cambiado! Y de eso nos quejamos, de que los que no han cambiado son los responsables del Barça, para adaptarse, se entiende. 

CRISPACIÓN. Me da que no se ha convencido a los socios. De haberse visto una mínima autocrítica, una ínfima muestra de humildad, tal vez, pero así, no. El ambiente sigue crispado, será importante que la pelotita entre todos los partidos, si no, habrá ruido de sables. En cualquier caso, que quede también claro que el problema no es exclusivo de este verano, esto se arrastra de varios veranos atrás. De los doscientos millones de Coutinho no habría que hablar, ni dudar, si en su momento se hubieran pagado cinco por Asensio o treinta por Isco. Esto es lo que duele al aficionado y lo que es difícil de perdonar. Y lo peor, en mi opinión, es cómo queda la cosa, el estilo especialmente. Mucho bla, bla, bla y poco tiqui-taca, porque si Paulinho es el fichaje que ha de dar respiro a Iniesta o echarse al equipo a las espaldas en un momento dado, apaga y vámonos.