Morata, el futbolista clave ante Marruecos

Morata marcó ante Japón

Morata marcó ante Japón

Gerard López

Gerard López

España está avisada. Ya sabe, porque así se lo ha demostrado el Mundial, que para seguir adelante deberá estar concentrada al cien por cien y que todo lo que no sea eso se paga muy caro. Los de Luis Enrique lo sufrieron ante Japón y deben ser muy conscientes de que una pequeña desconexión, aunque sea de diez minutos, un error personal o una expulsión te pueden enviar para casa.

El fútbol, al nivel que se juega en la Copa del Mundo, no perdona y hay que tener en cuenta cualquier mínimo detalle que pueda ser controlado. España no puede permitirse ninguna concesión porque, aunque en la fase de grupos existe cierto margen para la reacción, las eliminatorias ya no son, en ese sentido, generosas con quienes se equivocan. La selección ya hizo la concesión lógica que cualquier equipo suele tener durante un Mundial, ese mal momento que, en cuartos, está absolutamente prohibido. La consecuencia fue cambiar el camino inicialmente previsto hacia una hipotética final, nada grave y, de hecho, analizado como algo positivo para los intereses españoles.

Por un lado mucha gente se alegró por evitar hasta la final a Brasil o a Argentina, pero viendo el nivel de las selecciones que van por el otro lado, como Francia, Inglaterra o Portugal, es difícil considerar más sencillo el cuadro. Lo importante es centrarse en uno mismo y, en el caso de España, recuperar las sensaciones del primer partido y, sin subestimar al rival, que fue primero de grupo, imponer su fútbol, que considero superior al de Marruecos. Luis Enrique, en ese sentido, ha trabajado para recuperar al equipo mentalmente y, sobre todo, poner el foco en el aspecto futbolístico.

Y ahí es donde llega la decisión que considero más importante de cara al cruce con nuestros vecinos del sud. El dibujo no varía y hay pocas dudas en defensa y en el centro del campo, por lo que la elección más trascendente es elegir jugar con un delantero centro puro como Morata o una especie de falso nueve como hizo ante Costa Rica y Alemania. Bajo mi punto de vista, será un partido en el que España tendrá mucha posesión y deberá tener paciencia y mover con velocidad y ritmo el balón. Además, preveo un peso importante para las bandas en ataque, por lo que habrá centros al área y ahí Morata debe ser un jugador importante. Ha marcado tres goles en tres partidos, es un futbolista que fija a los centrales rivales y que tiene mucho remate. Estoy convencido de que puede ser decisivo ante Marruecos, un equipo rocoso que solo ha recibido un gol (en propia puerta) en la fase de grupos. Atacar bien y evitar transiciones, claves para pasar.