Mirotic, Calathes, y el tercer cuarto

Nikola Mirotic aportó puntos y energía al equipo

Nikola Mirotic aportó puntos y energía al equipo / FCB

Nacho Solozabal

Nacho Solozabal

SUPERANDO LA RESACA

La sensación de que el primer partido ante el Tenerife llegaba con poco tiempo de descanso para los blaugranas se constató a lo largo de los primeros veinte minutos. Una cierta precipitación, excesivos triples sin acierto, algo de relajación, y poca preparación mental para afrontar el primer duelo de la semifinal. Como ya nos tiene acostumbrados Vidorreta, los suyos van haciendo y, si no juegas a tope, no hay manera de desengancharte de ellos. Por eso están donde están. Cabe decir que, todo y no estar muy finos, la sensación era que el Barça dominaba el ritmo, y la clave estaba en pulir un par de detalles. Tras el descanso llegó el aluvión de juego de los de Saras. Calathes volvió a ejercer de mago, y todo lo que salió de sus manos era una pura delicia. Sus asistencias las aprovecharon, en especial, Mirotic y Gasol para acabar de dinamitar el partido. Los triples fueron cayendo sin pausa, y en defensa el Barça ahogó por completo a los tinerfeños. Ya contra el Joventut el tercer cuarto fue antológico y, sin duda, esta victoria tan contundente supone una inyección de moral para los blaugranas en un momento de la temporada en la que necesitan recobrar las buenas vibraciones.

SUMA Y SIGUE

Una de las mejores noticias que nos deja el triunfo del Barça es la excelente aportación de la mayoría de sus jugadores. Es cierto que, al final, el partido se prestaba a conseguir buenos números. Pero el hecho, por ejemplo, de que Mirotic resurgiera en el momento más delicado del duelo es especialmente destacable. El montenegrino necesitaba de una actuación así. No sólo es cuestión de tener buenas estadísticas, sino de ser el líder cuando sus compañeros te necesitan. Debe ser un punto de inflexión para él. También Gasol y Calathes estuvieron acertados. Dos piezas que han de apuntalar el juego del Barça y que da la sensación de que, a medida que se suceden los partidos, van a más. Pero también Smits, Abrines, Bolmaro, Kuric o Davies se apuntaron a la fiesta. A buen seguro que Saras está encantado de que una gran parte de los suyos vaya creciendo en este tramo final de temporada. Fue, es, una anécdota que Higgins se lo tomara con calma. Algún día también puede relajarse. Ahora es cuestión de cerrar la serie en Tenerife. No está el Barça para esfuerzos y tensiones extras como las que implicaría tener que jugar un tercer partido. Hay que ir por la vía rápida.