Del milagro de Pep al milagro de Xavi

Xavi deberá desplegar todos sus conocimientos para reflotar al Barça

Xavi deberá desplegar todos sus conocimientos para reflotar al Barça / EFE

Lluís Mascaró

Lluís Mascaró

Día 1. Empieza la nueva era del Barça. La era Xavi. Hoy Xavi toma el mando del equipo con el objetivo de iniciar la reconstrucción. No dirigirá su primer entrenamiento hasta el martes, pero este mediodía será presentado de manera oficial. Una rueda de prensa en la que expondrá las líneas maestras de su hoja de ruta. Y en la que Laporta deberá explicar las rocambolescas negociaciones con el Al Sadd, que acabaron con el pago a medias (entre el propio Xavi y el club) de la cláusula de rescisión de cinco millones de euros. El presidente tendrá que ser muy claro, convincente, porque los socios y aficionados merecen conocer los pormenores de un fichaje que ha vuelto a poner en evidencia la precaria situación económica del club.

De todas formas, lo realmente relevante será escuchar el discurso del técnico. Los culés necesitan un líder que genere ilusión. Un referente. Y Xavi, sin duda, es el más indicado para ejercer ese complejo cometido. Xavi es un regreso a las esencias, al modelo. Xavi es el mejor garante del estilo que convirtió al Barça en un equipo admirado en todo el planeta. Xavi tiene carisma y, sobre todo, credibilidad. Y esa es la clave para capitanear el proyecto. El Barça está hundido. Futbolística, física y psicológicamente. El desastroso empate en el campo del Celta el pasado sábado es la mejor demostración de esa dramática situación. La crisis es enorme. Y el trabajo que le espera, gigantesco. Xavi lo afrontará con entusiasmo y, esto es lo más importante, sin miedo. El descomunal reto que le espera solo es comparable al que asumió en su momento Guardiola, cuando cogió las riendas de aquel Barça que había sucumbido a la autocomplacencia y que acabó transformando en el mejor Barça de todos los tiempos.

Xavi apostará descaradamente por el talento de los jóvenes, pero combinándolo con la experiencia de los veteranos, a los que intentará remotivar. Tendrá que prescindir de jugadores que no aportan absolutamente nada al equipo (como son los casos de Umtiti y Luuk De Jong), buscar un salida para Coutinho (el mayor y el más caro fracaso de la historia del Barça) y fichar con acierto (y con poco dinero) los refuerzos del mercado de invierno. Todo ello mientras intenta encontrar el camino de la victoria, imprescindible para no perder definitivamente el tren de la Liga y para seguir vivo en la Champions. Yo, sinceramente, creo en la capacidad de Xavi para hacer posible el milagro. Pero necesitará el apoyo indiscutible y unánime de todo el barcelonismo para llevar a cabo la resurrección del Barça.