Messihablantes

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Rubén Uría

Rubén Uría

UN SOCIO PARA LEO. Que Messi está pidiendo socios a gritos no es ningún secreto. Lleva más de una década sosteniendo el club y cada día se siente más solo, así que tener junto a él a un chico que habla el idioma de Messi con la pelota es una auténtica bendición. Mientras el ‘diez’ sigue decidiendo su futuro, nada mejor que verle disfrutar con su mejor amigo, el balón. Su nuevo socio es Pedri, es puro talento y destila fútbol de barrio. Siempre tiene una solución para cada problema y es “Messihablante”. Ahora es el turno de Koeman. Debe aportar estabilidad y repetir equipo. De cajón: lo que funciona, no se toca. Y tiene una fórmula contra el fracaso: Messi+Pedri=Fútbol.

PARTIDO A PARTIDO. Un periodista preguntó de manera ‘original’: ¿Qué le falta al Atleti para ser campeón? Simeone respondió con contundencia: “Le faltan 25 fechas – jornadas-, así que vamos partido a partido, partido a partido y partido a partido”. La vida es aquello que pasa mientras Simeone pisotea a base de sentido común el traje de favorito de quita y pon que le quiere poner la caverna mediática. Hace nueve años que llegó al Atleti y a estas alturas no va a cambiar. En Donosti ganó con sus armas, con Carrasco y Marcos Llorente rozando la excelencia. El Atleti contabiliza 32 puntos en 13 partidos, pero Simeone no se detiene en eso. Tiene dos reglas que jamás romperá: Primera, vive partido a partido. Y segunda, en caso de duda, aplíquese la primera norma. Sencillo.

SÁLVESE QUIEN PUEDA. Tras quince jornadas, el Valencia está a un punto del descenso. Mientras el valencianismo espera que alguien practique el metafórico exorcismo para sacar a Meriton del cuerpo del club, aflora un problema triple: El entrenador no tiene herramientas para más. El equipo casi siempre quiere y casi nunca puede. Y el aficionado está harto de estar harto. En juego, la supervivencia del club. Y en el horizonte, un objetivo que no pasa por Europa, sino por luchar por la permanencia. Sálvese quien pueda, el máximo accionista y el presidente los primeros.