Messi-Suárez FC, el segundo mejor equipo tras el Barça

Messi y Suárez, goleadores

Messi y Suárez, goleadores / EFE

Ernest Folch

Ernest Folch

En el fútbol no hay atributo más importante que el de la ferocidad. El Barça demostró ayer que tiene a dos de los futbolistas con menos piedad que se recuerdan, dos jugadores con una voracidad infinita que, además, multiplican su desdeño por nada parecido a la clemencia cuando se juntan. El Eibar salió al Camp Nou con un planteamiento valiente y ambicioso, y en los primeros compases tuvo intención de tener la pelota y dominar la pelota. Pero se topó con el hambre insaciable de esta pareja de ‘killers’ que arrasa con todo lo que se le pone por delante: Messi logró su anunciado gol 400 en la competición y Suárez completó su enésimo doblete. Las cifras son espeluznantes: a día de hoy esta pareja ha marcado igual o más goles que todos los otros equipos de la Liga, o lo que es lo mismo: ellos dos son el mejor equipo de la Liga después del Barça.

COUTINHO CRECE Y MEJORA SENSIBLEMENTE

Una de las grandes noticias del partido fue el partido notable de Coutinho, que intervino magistralmente en el primer gol de Suárez, se mostró mucho más participativo y ofreció detalles de gran calidad. Es una gran noticia que Valverde tenga tantos dilemas a la hora de confeccionar el once inicial, síntoma de que el entrenador ha sabido construir una plantilla competitiva.

DOSIFICACIONES QUE NO LLEGAN

Estamos ya a mediados de enero y Valverde todavía no ha encontrado la manera de hacer descansar a pesos pesados de la plantilla con una sobreacumulación brutal de minutos. No se entiende qué hacían sobre el campo Luis Suárez y Rakitic con un 3 a 0 y todavía con casi media hora por disputar. Y, una vez más, se desperdició una oportunidad para que Aleñá sumara minutos: los equilibrios diplomáticos de la plantilla siguen siendo más importantes que la cantera.

LENGLET HA HECHO OLVIDAR A UMTITI

Lenglet volvió a cuajar otro extraordinario encuentro, donde volvió a mostrarse como un jugador sobrio e inteligente, que nunca pierde la posición y que se ha afianzado sin estridencias como titular indiscutible en la posición de central izquierdo. La prueba de su gran rendimiento es que hoy casi nadie se acuerda de una baja tan sensible como la de Umtiti. En pleno debate sobre los centrales que vienen y los que se van, es obligado un reconocimiento a la secretaría técnica por este fichaje tan silencioso como meritorio.