Messi no puede hacer siempre milagros

Messi, desolado ante Dzeko

Messi, desolado ante Dzeko / AFP

Xavier Ortuño

Xavier Ortuño

Leo Messi es el jugador más decisivo del mundo, es tan decisivo que a veces parece que pueda hacerlo todo solo. Pero la realidad es que cuando más decide, cuando más brilla es cuando el equipo le acompaña y le ayuda. Si sus compañeros le generan carriles, le facilitan las paredes y ofrecen posibilidades de combinación hacen que sea más fácil que sea decisivo.

Es cierto que una vez cambió un partido contra el PSG saliendo medio lesionado desde el banquillo, pero no todos los días puede obrar milagros el genio nacido en Rosario. Valverde no estuvo acertado en Roma y optó por repetir un once que llegaba tocado y desgastado a un partido al que le hubiera venido bien algo de frescura y claridad de ideas. A los genios hay que dejarles trabajar pero es mucho mejor ponérselo fácil.