Messi nos pone las pilas

Messi, en un momento de su discurso previo al Gamper

Messi, en un momento de su discurso previo al Gamper / EFE

Lluís Mascaró

Messi es el termómetro del barcelonismo. El estado de ánimo del crack argentino marca las sensaciones de los culés. Por eso, todos estábamos esperando su discurso previo al Gamper. El verano pasado, encendió la ilusión de socios y aficionados anunciando que 'la copa linda' era el gran objetivo. Pero el Barça de Valverde fracasó estrepitosamente en la Champions, por segundo año consecutivo, y el sueño de Messi y de todos los barcelonistas se esfumó. Se ganó la Liga con una superioridad insultante sobre el Madrid, pero la temporada acabó con sensación de fracaso. 

Messi debía afrontar un nuevo discurso tras las vacaciones, en las que ha reflexionado y, sobre todo, ha recuperado fuerzas. Y ambición. Porque el capitán blaugrana sorprendió a todos con un parlamento enérgico y valiente. Reivindicando las 8 Ligas ganadas en los últimos 11 años ("al cabo del tiempo veremos lo importante que es") e insistiendo en la Champions: "La verdad es que es difícil decir algo después de la temporada pasada, pero no me arrepiento de nada. Vuelvo a repetir lo mismo que dije. Confío en esta plantilla, en estos jugadores y en este cuerpo técnico y no tengo duda de que todos juntos vamos a pelear por todo".

Con un ímpetu dialéctico desconocido, Messi nos puso las pilas a todos. Especialmente a aquellos que dudan de este equipo que ha ganado tanto y durante tanto tiempo. Messi, más veterano, más experto, más comprometido, envió un mensaje rotundo: hay que seguir confiando en este Barça. Con De Jong, con Griezmann y (tal vez) con Neymar, será más fuerte que nunca. Y con la convicción de Messi, todavía más.