Messi y Laporta hacen felices a todos los culés

Leo Messi, jugador del Barcelona

Leo Messi, jugador del Barcelona / VALENTI ENRICH

Lluís Mascaró

Lluís Mascaró

Messi y Laporta han conquistado el primer título de la temporada. La renovación de Messi es la mejor noticia para los culés de todo el planeta. Más que cualquier victoria. Porque es un triunfo de lo que representa el ‘més que un club’: compromiso y amor a los colores blaugranas. Laporta hizo lo más difícil: convencer a Messi para que continuara en el Barça. Después llegaron las negociaciones para renovar, que se han prolongado hasta hace unas horas. Tampoco fueron sencillas, porque se trata de un contrato de enorme complejidad. Solo queda la firma oficial del acuerdo, que depende de que el presidente consiga rebajar la masa salarial para inscribir al crack argentino con su nueva ficha. El esfuerzo económico que hace Messi para seguir en el Barça (cobrará la mitad y alargará su vinculación hasta el 2026) es tan importante como el que hace Laporta para retener al mejor futbolista del mundo y de la historia. La situación financiera del club es dramática, mucho peor de lo que se piensa, y conseguir que Messi siga es, en las actuales circunstancias, un gran éxito. De hecho, la continuidad de Messi era una promesa electoral que el nuevo presidente ha cumplido. No sin dificultad. Pero que ha cumplido.

La formalización del acuerdo puede tardar todavía unos días. Incluso puede que Messi no esté el domingo en la presentación del equipo y no juegue el Gamper contra la Juventus de Cristiano. Más allá del impacto mediático de esta imagen, lo importante no es cuando se firme el nuevo contrato sino que se firme. Cuanto antes, mejor. Por supuesto. Pero lo más difícil ya está hecho. Recordemos que hace poco menos de un año Messi enviaba un burofax pidiendo a Bartomeu que le dejara irse gratis del Barça, harto de fracasos y mentiras… Once meses después, Messi renovará feliz e ilusionado con el nuevo proyecto. Para valorar dónde estamos hay que recordar de dónde venimos. La sintonía entre Laporta y Messi ha hecho posible la radical transformación. Enhorabuena a ambos. Y felicidades a los culés de todo el mundo. ¡Messi se queda!