El ‘Sí’ de Messi

Messi  habló tras la final de Copa

Messi habló tras la final de Copa / VALENTÍ ENRICH

Xavi Torres

Xavi Torres

Aunque parezca mentira, el Barça ha ganado un título. En una segunda parte brillante, los azulgranas pasaron por encima de un depresivo Athletic exhibiendo el mejor fútbol de la temporada. El nuevo proyecto de Joan Laporta ya tiene una obra de referencia en la que fijarse para preparar el futuro. ¿Con Messi? 

La victoria del sábado en Sevilla no es una Copa más. Lo que sucedió durante el partido y lo que pasó después, en tiempo de celebración, tampoco. Con Jorge Messi en Barcelona y, si usted nos lo permite, tratando de huir de las euforias puntuales, vamos a hablar del futuro de Messi.

A base de decisiones equivocadas en lo colectivo y de mentiras, en lo personal, el crack del Barça perdió la confianza en Josep Maria Bartomeu y en su gestión. Leo se alejó del presidente hasta autoconvencerse de que al final del túnel no había nada. Habló con el Manchester City pero nada fructificó porque no quiso luchar su salida en los juzgados. En ese momento, clave para su futuro, Messi pudo cerrar su adiós firmando sus intenciones en un documento privado que medio año después, en enero de 2021, adquiriera validez jurídica. Pero no lo hizo. Ni Ferran Soriano, en nombre del ManCity, ni Jorge Messi, en el del futbolista, pactaron el reencuentro para julio de 2021. Hoy, además, no existen ni siquiera conversaciones para retomar viejos propósitos. Tampoco hay documento de acuerdo con el PSG, aunque sí -en este caso-, deseos de los franceses por contar con la estrella argentina. 

Paralelamente, el vestuario del Barça ha ganado un trofeo en el mejor momento posible para la nueva Junta. Desde el vestuario, el primer mensaje para Messi: su gente, los veteranos, tienen ganas de seguir en la lucha y parece que su deseo casa con el de los jóvenes, algunos con brillante futuro que, además, sienten devoción por él -lo del carrusel de fotos en La Cartuja es inaudito-. Se sabe el líder y suele no fallar en el cumplimiento de sus responsabilidades. Desde el banquillo, buena química con Koeman, por su pasado y por su presente. Messi siempre ha sido generoso con las leyendas azulgranas y, en este caso, se ha mostrado encantado con la naturalidad con la que ha sido invitado por su técnico incluso a aprobar planteamientos futbolísticos.

En el palco todo ha cambiado. Messi -y no es el único futbolista- siente que Joan Laporta es uno de los suyos. Veremos hasta dónde llega el dinero para convencerlo de lo que hay porque ya saben, a Messi, a estas alturas de la película, le importa el dinero pero, sobre todo, el proyecto: Leo no olvida, a pesar de la Copa, que solo ha ganado uno de los siete partidos contra equipos-top que ha jugado este año. ¿Y la afición? Es la gran ausente, pero la presión mediática de quienes se dejaron llevar por los intereses del poder también ha cambiado de opinión. 

El sábado se abrazó con sus compañeros, con el entrenador y con el presidente. Y sonrió mucho, como exhibiendo felicidad, justo en el momento en el que hay que tomar decisiones.