Lo mejor que puede hacer el Barça es no fichar a nadie

El Barça acierta plantándose con Rodrigo. Las elevadas pretensiones del Valencia por un delantero que esta temporada ha marcado solamente tres goles rompen definitivamente una negociación que provocaba en el barcelonismo más escepticismo que ilusión.

El presidente del Valencia estuvo en Barcelona negociando y el propio Rodrigo estuvo ayer pasando una revisión médica a escasos pasos del Camp Nou, pero no habrá operación, y Rodrigo pierde definitivamente el tren del Barça. Digamos que pasa a ser otro nombre más en la larga lista de célebres ‘no fichajes’ de la historia del Barça.

Abel Ruiz, otro bandazo

Esta vez, no parece que el aborto de la ‘operación Rodrigo’ cause ninguna decepción en el barcelonismo, que en cambio sí asiste desconcertado a las ventas de Carles Pérez (casi cerrado) y Abel Ruiz (en negociaciones avanzadas). Cuando el club admite abiertamente que necesita un ‘9’ es como mínimo chocante que active entonces el traspaso de los dos goleadores que tenía en la cantera.

El caso de Abel Ruiz deberá explicarse con detalles: hace menos de un año se le subió la ficha a más de un millón de euros con la explicación de que era el ‘9’ del futuro. Un bandazo más en la historia reciente de la cantera blaugrana, que ahora mismo parece más destinada al negocio que a promocionar el talento.

A pesar de todo, es una buena noticia que el Barça haya cancelado el fichaje de Rodrigo. Demasiado incierto, demasiado caro y demasiadas sombras. Lo mejor que puede hacer el Barça ahora es justamente no fichar a nadie y dejar de ir dando tumbos que erosionan su imagen. Si el club se creyó en su día que Griezmann podía hacer de ‘9’ debe ir al final con su apuesta.

Si se llega casi al mes de febrero con una plantilla, no pueden hacerse correcciones de este tamaño a media temporada poniendo en riesgo la economía del club y la coherencia del proyecto. Desde la destitución de Valverde el club da síntomas de ir a la desesperada. Por una vez sería aconsejable no hacer nada y meditar con calma cuál es el plan de verdad a medio y largo plazo.