Un magnífico Rayo ante un Barça espeso

Lewa

Lewa / AFP

Pichi Alonso

Pichi Alonso

Ni efectivo de cara al gol ni velocidad en la circulación de balón. Eso penalizó al Barça ante un Rayo Vallecano que ya no sorprende. En los tres últimos partidos frente a los azulgranas no ha encajado un gol, toda una demostración de lo bien que trabaja Iraola. 

En los primeros quince minutos de partido vimos lo que ya estaba previsto en el guion. Una presión muy alta del Rayo Vallecano, con Trejo y Camello incomodando la salida de balón del Barça a través de Eric García y Christensen, pero sin llegar al área de Ter Stegen... salvo en la gran ocasión que desperdició el veloz Álvaro.

Poco a poco el Barça fue haciéndose con el dominio absoluto del balón y del juego, con llegadas muy claras y disparos a puerta, sobre todo con Dembélé y Raphinha, muy activos. Esta vez estaba fallando la finalización. Sigue siendo una propuesta irrenunciable para Xavi abrir el juego a bandas y hacer bascular a su rival, evidentemente para crear espacios, algo que se está poniendo muy caro en el fútbol actual.

A mi modo de ver, la apuesta de Xavi por Araujo como lateral derecho demuestra la poca confianza que tiene en los otros laterales de la plantilla: Dest y Sergi Roberto. Después rectificó. Tan cierto es que pudo ganar el Barça.. como el Rayo. De hecho, las dos mejores ocasiones fueron de los chicos de Iraola. Ter Stegen salvó a su equipo y eso, siendo una buena noticia, también tiene su lado negativo.

Es cierto que este Barça gusta, se le vislumbra un nivel muy alto, tiene jugadores de un nivel espectacular, pero debe mejorar en sus prestaciones. Xavi tiene donde escoger y eso es una gran garantía. De momento deberá mejorar en la efectividad y en la velocidad de pelota.