Opinión

El Madrid tiene lo que se merece

Carlo Ancelotti y Munuera Montero en el Osasuna - Real Madrid de LaLiga 2024/25

Carlo Ancelotti y Munuera Montero en el Osasuna - Real Madrid de LaLiga 2024/25 / AP

Así no se puede jugar. Jornada 24 de LaLiga y todo, todo por decidir y la competición camina acelerada y enloquecida con el Madrid crispando el ambiente semana tras semana. Cada partido de los blancos se convierte en una auténtica guerra civil con ruido y polémica constante. Los árbitros ya no quieren pitarles y cada designación para un partido del Real es un 'marrón' para el colegiado de turno.

Eso es lo que han conseguido crispando tanto el ambiente de nuestro fútbol, los árbitros tienen auténtico pánico a pitar al Real Madrid y ya no digo a equivocarse en su contra, que es casi como una condena eterna. Se pudo equivocar el árbitro y el VAR no señalando penalti a favor de los blancos nada más comenzar el partido, pero igual que se han cometido errores en contra de todos los equipos de nuestra liga y no se ha organizado la mundial como cada vez que ocurre contra el Real Madrid.

Ancelotti perdió su flema

Las cartas escritas por el club, las continuadas protestas, los vídeos de su canal de televisión contra todos los árbitros y todo eso extendido al equipo. Protesta tras protesta, empezando por un Carlo Ancelotti que ha perdido su flema y su talante de señor de los banquillos para pasar a ser el primero en abanderar la indignación y la protesta del Madrid.

Están consiguiendo que al final casi lo menos importante es lo que ocurre en el campo. El Madrid este sábado ante Osasuna llevaba bien el partido, iba ganando y estaba líder de LaLiga, pero se mete en mil y una batallas por todo lo que le rodea. Él mismo se ha metido en una espiral protestante que no le beneficia y que está acabando por descentrar a todo nuestro fútbol. 

Bellingham llegó a nuestra liga y se le vendió como un santo varón que poco menos llevaba un lirio en la mano, la sonrisa en la boca y apenas protestaba. Ahora se ha convertido en un futbolista amargado, protestón, inaguantable y perdiéndose más en protestas que en su cometido de jugar. Se une al club de Vinícius que va a escándalo partido por partido.

Partidos como el de Pamplona los han sufrido otros tantos equipos de nuestra liga, empezando por el Barcelona y siguiendo por todos los de la clasificación, en esta misma jornada el mismo Alavés. El Madrid no es el único que puede verse o sentirse perjudicado y desde luego no puede convertir cada partido en una batalla campal, por cada jugada.

Al final tienes lo que te mereces. Y lo que era un partido bajo control y con marcador a favor se convirtió en un auténtico calvario para los blancos. Expulsión de Bellingham que ya veremos qué sanción le acarrea en un momento decisivo de la temporada, el equipo que se va del partido, Osasuna que, a la suya y en superioridad numérica, busca el empate que curiosamente llega de penaltí. Claro, eso sí. 

Desde que el Madrid escribió la famosa carta contra todo y contra todos le han pitado dos penaltis en contra en dos jornadas. Recuerdo que no le habían pitado ninguno en las primeras veinte jornadas del torneo. Lo mejor que puede hacer el Barcelona tal como va todo, es ir a la suya.