Luis Enrique es el defensor número uno de Luis Suárez

FICHARLO A MEJOR PRECIO. La dura sanción a Luis Suárez no cambia los planes del Barça. Todo lo contrario, Luis Enrique se ha convertido en su defensor número uno. Acepta que se incorpore en octubre, está dispuesto a ayudarle para que no vuelva a cometer ninguna locura y considera que es el revulsivo que necesita la delantera. Como todo entrenador nuevo, el asturiano ahora tiene poder y credibilidad. Decide y manda. La directiva está dispuesta a cumplir sus órdenes por lo que la negociación con el Liverpool se va a retomar con urgencia. Una cosa es evidente, el coste del traspaso no será el mismo ya que con la sanción cotiza a la baja. Se habla de 50 millones y en este sentido será muy importante la presión que haga el propio jugador, que está encantado con la idea de jugar en el Camp Nou. Suárez ya está en su Uruguay natal, donde fue recibido como un héroe, como una víctima. Cada día se levantan voces a su favor. Maradona se ríe del castigo: “¿Por qué no lo mandan a Guantánamo?”. Es muy probable que Suárez haga una carta abierta a la afición confesando su problema y anunciando que está dispuesto a ponerse en manos de los médicos para rehabilitarse. No es un animal, es un enfermo. Como tal hay que ayudarle. 

REBAJAR LA SANCIÓN. Comienza a extenderse la opinión de que la sanción a Luis Suárez es excesiva, que la FIFA se ha pasado dos pueblos, que han cometido el error de dictar un castigo de cara a la galería. Prueba de ello es que hasta el jugador italiano que recibió el mordisco, Chiellini, ha tenido la nobleza de considerar excesiva la sanción. Este documento sin duda tendrá un protagonismo importante en el recurso que van a presentar al TAS, el Tribunal de Arbitraje Deportivo. Los abogados del jugador uruguayo han comenzado a trabajar en la defensa y en este sentido van a pedir colaboración a los abogados del Barça que consiguieron que la FIFA diera marcha atrás revocando la sanción de no poder fichar refuerzos. No se descarta que cuando termine el Mundial el organismo que preside Blatter rebaje la sanción antes de afrontar la posibilidad de perder el caso en los tribunales de justicia. El prestigio de la FIFA ha entrado en crisis desde que eligió a Catar como sede del Mundial 2022 ya que cada día son más los países que piden repetir la votación.