Los gigantescos retos que tiene el Barça

La subjetividad y la objetividad son dos conceptos contrapuestos. El primero es inherente a la forma de pensar de una persona, es decir, a su conciencia y juicio. El segundo se aleja de los sentimientos y abraza lo que es indiscutible, cierto, matemático, científico. Decir que el Barça ha hecho una pésima o aceptable temporada es subjetivo, opinable. Para eso existe la expresión “ver el vaso medio lleno o medio vacío”.

Afirmar que cerrará la peor Liga en puntos de los últimos quince años no es opinable, es un hecho demostrable. Desde el ejercicio 2007-2008, con Laporta en la presidencia y Rijkaard en el banquillo [cuando ya se sabía que Guardiola sería su sustituto], el Barça sumó 67 puntos. El equipo de Xavi, aún ganando sus dos próximos partidos ante Getafe y Villarreal, alcanzaría los 78 puntos, uno menos que la temporada pasada, cuando terminó en tercera posición y pudo acceder a la Supercopa de España gracias a ser finalista de la Copa del Rey y ganándola, único título del Barça en tres años.

Queda un mes y medio para finalizar la actual temporada, el 30 de junio, y el FC Barcelona se haya inmerso en una brutal vorágine de actividad a todos los niveles, un corto periodo de tiempo donde debe tomar decisiones de gran calado para el futuro a corto y medio plazo de la entidad. Será el momento de regresar a la psicología y ver si el vaso está medio lleno o medio vacío.

Acaba el primer año completo de Joan Laporta y su junta directiva al frente del FC Barcelona y veremos hasta dónde han llegado su programa electoral y las medidas para sacar al club de la tan cacareada crisis económica. ¿Tiene el club el equipo ejecutivo necesario para conseguirlo?

El desafío es gigantesco en todos los frentes, también en lo deportivo, social y patrimonial. La entidad tiene que reescribir la historia y volver a formar un equipo campeón y competitivo. Laporta ganó las elecciones por el optimismo que generó, pero el movimiento se demuestra andando. Paralelamente debe acometer la transformación del Camp Nou y el Espai Barça. ¿Llegarán los tan necesarios 1.500 millones de Goldman Sachs? 

En los próximos días el FC Barcelona anunciará decisiones que, según muchos expertos, tendrían que haberse activado mucho antes, incluso en los meses que Laporta fue presidente del club la temporada pasada, como la venta de los activos del Barça Corporate. En su lugar, el club decidió cerrar el ejercicio 20-21 con 480 millones de pérdidas y aquellas provisiones y depreciaciones han tenido consecuencias.  

Llegó la hora de tomar decisiones... y tomarlas bien. No hay margen para errores. El reto es mayúsculo y hay que estar a la altura. El presente y el futuro del FC Barcelona están en juego.