Los gastos que sean ingresos. Y al revés

El vicepresidente económico del FC Barcelona, Eduard Romeu, hizo el miércoles un diagnóstico de la situación económica del club tras todos los movimientos realizados durante el pasado verano. “Hemos salvado el club económicamente, sí, pero todavía no lo tenemos sano”, expresó en los micrófonos de Catalunya Ràdio.

Y así es. La junta directiva que preside Joan Laporta ha trabajado mucho y bien desde su llegada al palco para revertir la desastrosa situación económica heredada, pero todavía queda camino por recorrer. No hay más que analizar los números que la directiva presentará a la Asamblea de Compromisarios del próximo 9 de octubre. Se cierra el ejercicio 2021-22 con unos beneficios de 98 millones de euros gracias a la venta del 10% de los derechos de televisión por 25 años a Sixth Street por 267 millones. Sin esa operación, las pérdidas hubiesen superado los 150 millones como consecuencia de no haber podido rebajar la masa salarial como se esperaba (aunque se ha hecho un gran trabajo con una reducción de 150 millones) y por la prematura eliminación del primer equipo tanto en la Champions como en la Europa League.

Y podemos seguir con los números del presente curso. El Barça presentará a los compromisarios un presupuesto de 1.255 millones de euros para la presente temporada con una previsión de beneficios de 274 millones. Debe considerarse que en los 1.255 millones de ingresos no están contemplados los 200 conseguidos por la venta del 49,9% de Barça Studios a Socios.com y Orpheus Media, pues son un ingreso financiero. Sí están los 400 millones ingresados por la segunda palanca, la venta del 15% de los derechos de televisión a Sixth Street. Un rápido análisis de estos números da para ver que los gastos serán de 980 millones, casi mil, y que los ingresos, sin la segunda palanca, serían de unos 850 millones.

Es por ello que el enfermo todavía no está sano. Porque esos números se deben revertir. Ese es el objetivo de la directiva de Laporta y para ello trabajan y seguirán trabajando. Para que los ingresos lleguen a los mil millones en la próximas temporadas y los gastos no pasen de los 800. Cuando se logre el objetivo, se podrán seguir reforzando los equipos profesionales y también retornar deuda.

LA MASA SALARIAL

Aumentar los ingresos deberá hacerse con la dificultad, como mínimo el próximo curso, de ir a jugar a Montjuïc. Se deberá trabajar más en patrocinios y ser inflexibles en la reducción del gasto y la masa salarial deportiva. En un horizonte ya cercano está el adiós de los capitanes y sus altas fichas. Se deberá sumar la reducción de otros contratos inasumibles.