La Liga de los Lenglets y Albas

No será un partido para recordar, pero sí una victoria que acerca muchísimo al título de Liga. Y no es que el Barça tema por el campeonato, pero no hay duda que cuanto antes se resuelva, mejor. Para evitar lesiones innecesarias y dar descanso a los titulares con el claro objetivo de ganar la Champions. Ante la Real fue un partido sin salsa, sin ganas. El Barça salió de paseo a la espera de una genialidad de sus cracks y, finalmente, decidieron dos actores secundarios. Lenglet y Jordi Alba demostraron que la plantilla blaugrana es, con mucho, la más potente de la Liga y los números de la tabla clasificatoria no engañan.

Es cierto que buena parte de esta Liga se debe a Messi, un futbolista capaz de tumbar por si solo a los rivales. Pero el argentino ha estado rodeado de un grupo de futbolistas que rinde siempre al máximo nivel, con una regularidad pasmosa. Un buen ejemplo de ello es el francés Lenglet, uno de los fichajes más rentables de los últimos años. Marcó ante la Real, pero da muchas cosas más desde atrás. Un futbolista necesario para facilitar las cosas a sus compañeros. También marcó Alba, el eterno lateral zurdo indispensable en este Barça. 

Los blaugrana ganaron casi sin convicción, pero en el Camp Nou son un auténtico rodillo. Y eso que la Real estuvo impecable en su planteamiento y en el intento de disputarle el control de balón al Barça. Al final, fue demasiado poco para un Barça que puede campeonar en el mes de abril. Y eso tiene mucho mérito. No es fácil aguantar el ritmo todo el año y meterle una diferencia abismal de puntos a Atlético y Madrid. La Liga tiene mucho valor y cuesta mucho ganarla. Hay que valorarla.