Lewandowski marca el camino

Lewandowski, sobre su sanción: "Tres partidos son demasiado"

Lewandowski, sobre su sanción, en la entrevista para SPORT: "Tres partidos son demasiado" / VALENTÍ ENRICH

David Bernabeu

David Bernabeu

Asume Lewandowski su liderazgo en las entrañas del Camp Nou con una naturalidad inusitada. Rezuma paz y ambición a la vez, pisa firme en cada rincón de la Ciutat Esportiva, como si llevara años y no meses en el club; y construye el mensaje maduro y sosegado que le otorgan sus 19 títulos en la élite.

Da gusto escucharle, pues mezcla autocrítica, autoexigencia y calma casi a partes iguales; en un discurso plenamente conciliador con las esencias del Barça, casi más propio de un ídolo forjado en La Masía que el de una superestrella advenediza a la liga española.

Metido de lleno en ese compromiso, Robert descorchó en Sport el cava navideño, situó el orgullo de pertenencia por encima de los resultados en sus deseos para el 2023 y volvió a plantear una frase para la pizarra del vestuario: "Queremos pelear la Liga, pero el club necesita tiempo y ser paciente". Es ya la segunda vez que defiende esta idea.

Mientras, en mentideros más cercanos al club y conocedores de lo mucho que costaron procesos que luego desembocaron en equipos de época, se han sucedido las encuestas sobre si Xavi Hernández debe seguir si cierra la temporada sin títulos. Parece mentira que Lewandowski, un tipo de 34 años que siempre anduvo lejos del club, sea quién deba venir a decirnos, tras haber visto al Barça hundirse en el barro, cuál es el camino. Es casi sonrojante.

Ya sé que Xavi, en un acto de honestidad, anunció que se iría si no gana nada. Sabe que el entorno no lo iba a permitir y quiso aclarar que él no va a ser un problema. Pero la potestad de seguir a Lewy pertenece al presidente. Laporta, el jueves, fue meridiano... "La continuidad de Xavi no depende de los títulos", dijo. Pero llegado el caso, hacerlo nunca es tan fácil como decirlo.

Es importante que el presidente entienda algo: la Liga es importante, pero la estabilidad te la da el tiempo. Arteta, al borde de la destitución hace un año en el Arsenal, vale como ejemplo. Y vale mucho.