Las lesiones ponen a prueba la plantilla

Xavi, durante el choque en el Camp Nou ante el Elche

Xavi, durante el choque en el Camp Nou ante el Elche / Valentí Enrich

Lluís Mascaró

Lluís Mascaró

Xavi sabe, mejor que nadie, cómo gestionar un vestuario. Como jugador y capitán que fue, conoce perfectamente todos los códigos del mundo del fútbol. Y es consciente de que, a lo largo de una temporada, va a necesitar a todos los componentes de la plantilla. Hay un once de lujo. Por supuesto. Pero con más de once titulares. Y suplentes que, en función de las circunstancias, pueden acabar siendo también titulares. Como va a suceder ahora por culpa de la acumulación de lesiones que ha sufrido el Barça en este maldito parón internacional. Cinco jugadores han caído casi de forma simultánea: Araujo, Koundé, De Jong, Memphis, todos ellos con sus respectivas selecciones, y Bellerín.

Estas bajas representan (especialmente las de los dos centrales) una auténtica pesadilla para Xavi. Y será ahora cuándo se pondrá a prueba la profundidad y el valor real de la plantilla. El técnico blaugrana deberá empezar a encajar las piezas del rompecabezas en el momento más complicado de la temporada: un terrorífico mes de octubre con nueve partidos, entre ellos el decisivo doble duelo de Champions ante el Inter y el clásico de Liga en el Bernabéu. El Barça no puede fallar en esta maratón previa al Mundial (jugará otros tres encuentros en la primera quincena de noviembre, antes de que se paralicen las competiciones de clubs), porque se juega gran parte de sus opciones de títulos. 

El puzzle, sobre todo en defensa, es muy complejo. Xavi espera que Sergi Roberto se recupere a tiempo para tener un lateral derecho, aunque estudia otras tres alternativas: recolocar a Eric Garcia en esa posición, darle una oportunidad a Alvaro Núñez (Barça Atlètic) o cambiar el dibujo y jugar con una línea de tres centrales (como ya hizo ante la Real Sociedad). Cualquier opción rebaja el elevado porcentaje de fiabilidad de la defensa blaugrana, porque el nivel que ofrecen Araujo y Koundé es altísimo. Menos preocupantes, por supuesto, son las ausencias de De Jong (solo una semana) o Memphis.

Tanto en el centro del campo (donde el tridente Busquets-Pedri-Gavi es intocable) como en la delantera (Lewandowski es el 9 indiscutible, con Ansu Fati como apoyo), Xavi tiene suficientes argumentos como para no sufrir. Todas las variaciones que deberá hacer el entrenador pueden acabar por impulsar a Piqué a la titularidad. Una carambola absolutamente inesperada.