Leo Messi es presente

Messi convierte en oro todo lo que toca

Messi convierte en oro todo lo que toca / VALENTÍ ENRICH

César L. Menotti

César L. Menotti

Lionel Messi ya ocupa un lugar en la historia del fútbol, un puesto de privilegio por todo lo que ha hecho con Argentina y con el Barcelona. También un lugar en Barcelona, su ciudad en la que ha formado su familia. Entiendo que no es momento para que él haga una revisión de su historia. Nada le hace más feliz que su relación con la pelota y todo lo que deviene de esa relación, el juego. Y su fútbol es una representación increíble de su relación con el Barcelona. 

No es tiempo de hacer revisiones de su carrera porque Lio es presente, un presente maravilloso de 32 años repleto de sabiduría. En el partido contra el Valladolid dio una muestra más de su actualidad, de su vigencia. La lástima es que ha vivido más en el terreno de juego que lo que le queda por vivir.  Pese a ello, los retos con el Barça y con la selección perduran.

Cuando le invitan a hacer una revisión de su vida, tal y como ocurrió recientemente en una entrevista en Argentina, le llevan a hacer un análisis del paso del tiempo, y aún es un jugador en actividad, entero y feliz, compitiendo como en su mejor momento. 

Le preguntan por una historia que no está acabada, lo escribe un presente que ya lo coloca entre los cuatro mejores jugadores de la historia. Y ni siquiera se avista aún un sucesor que ponga en jaque su vigencia.

En los sueños de Lionel Messi siempre están los objetivos que no consiguió. Es el motor de su carrera. El de su vida, la familia que formó con Antonela, sus tres hijos. Y no es casualidad que su familia esté radicada en el lugar dónde él es feliz, en Barcelona. Y que dude acerca de la posibilidad de jugar un día en su querido Newell’s

No importa cuál sea el resultado final de su carrera. Cuántos títulos más, cuántos goles, cuántos récords consiga. De si logrará o no el Mundial con Argentina. No vale el análisis de ese lugar, más allá del resultado de su carrera ni siquiera es comparable a la de los otros reyes (Pelé, Maradona, Di Stéfano...) por la vigencia en el paso del tiempo, por sus incesantes progresos. ¿Quién puede vaticinar los logros de Messi en los próximos años? Ha logrado muchos y pudo conseguir muchos más en el caso de que hubiera logrado con Argentina algunos que tuvo al alcance de la mano.

Sin embargo, no va a cambiar nada el número de títulos que gane. Que finalmente gane el Mundial, que gane otra la Champions, o que consiga otro Balón de oro. Todo lo que  ha hecho por el fútbol tiene mucho más valor que cualquier título que haya de por medio.

Carrera brillante

Su carrera es brillante y no está concluida. Messi acumula años en su cabeza y en sus piernas pero está muy comprometido con sus obligaciones. Su evolución es un desafío personal, sus objetivos desafíos colectivos que él quiere aún liderar. Ha hecho todo, pero no... Hablar de él en pasado cuando es presente es un error. El pasado son Pelé, Di Stéfano, Maradona, Cruyff. Messi es hoy y nadie sabe hasta cuándo. Habrá un día después de Messi como hubo un día después de Cruyff, un día después de Maradona. Y no sería fácil, claro. Los hinchas del fútbol entero los extrañarán y su vacío se sentirá en el Camp Nou. Pero como Messi es presente hasta los rivales quieren seguir disfrutando de él. 

No se me ocurriría hacer una revisión de su historia porque aún tiene tanto para darle al fútbol y es tan equívoco creer que ya lo dio todo. Es presente y futuro prometedor con 32 años.

Ser un gran profesional, ser un chico que parece de 20 años tiene que ver con ser feliz jugando al fútbol. Con el espíritu amateur que aún llena sus días. Con sus ganas de competir, y de seguir ganando títulos con Barcelona y con la selección. No hablemos del Messi del recuerdo, hablemos del Messi que nos ilusiona con este presente y el futuro. Ya habrá tiempo para repasar su carrera. Ahora toca seguir disfrutando de lo mucho que nos está dando.