Laprovittola se viste de Superman

Barça - Bayern

Barça - Bayern / Valentí Enrich

Nacho Solozabal

Nacho Solozabal

Una final inolvidable. Los nervios acumulados a lo largo del encuentro tuvieron su válvula de escape cuando se señaló el final y el Barça ya tuvo el pasaporte para Belgrado. La conexión del público del Palau con los suyos fue insuperable. Inasequibles al desaliento hasta en los momentos de más dudas. El descanso marcó un antes y un después.

El dominio del Bayern en los primeros veinte minutos fue total. Con la lección bien aprendida, los jugadores alemanes cerraron su canasta e invitaron a los blaugranas, en especial a Calathes y Jokubaitis, a que lanzaran de fuera. Y les salió bien. Gran defensa, mucha dureza, colapso del juego, un sinfín de canastas fáciles en transiciones y control de las emociones. El libro de estilo alemán hasta que se llegó al descanso. El Barça, por su parte, se iba agarrotando poco a poco, y tan sólo un par de triples de Abrines y el trabajo constante de Mirotic permitían respirar al público. Pero Jaramaz, una noche inspirada la suya, anotó cómo y cuándo quiso y el escenario se iba complicando.

No obstante, la sensación era que el Barça debía reaccionar y que los jugadores importantes aparecerían tarde o temprano. El ambiente era irrespirable y el miedo escénico, tanto del público como de los jugadores, más que palpable.

EL TERCER CUARTO FUE DE LAPROVITTOLA

Lo hizo casi todo y todo lo hizo bien. Aún no me lo creo. En un alarde de carácter, ambición, compromiso y acierto, quiso que la pelota fuera suya para hacer con ella lo que quisiera. Anotó triples increíbles y decisivos, cambió el ritmo del juego -el Barça anotó 29 puntos en este cuarto-, y forzó penetraciones imposibles que acababan en falta y tiros libres.

Una actuación en un momento tan crucial del duelo es para recordarla. Cabe decir que tuvo en Mirotic a un compañero perfecto. Se apuntó a la fiesta con entradas por la izquierda, triples y una presencia constante. También Calathes anotó su primer triple, lo que provocó la alegría desenfrenada de los seguidores culés y el desconcierto alemán. El Bayern entró en estado de coma al tramo final del partido.

Los hombres de Trinchieri solo respondían con algún zarpazo puntual -un par de triples de Hunter-, que tenían rápida respuesta blaugrana. Buen partido de un Abrines que estuvo bien delante pero, en especial, capturando 7 rebotes, líder del equipo en esta faceta. Una victoria trabajada al límite. Y muy merecida. El mejor equipo hasta la fecha en la Euroliga estará en la Final Four. Muchas felicidades.

UN BARÇA DESMELENADO ACABA DESARBOLANDO AL BAYERN

Un recital. Sólo si lo has podido ver te lo acabas creer. Decir que fue decisivo es quedarse corto. Fue el líder imprescindible del Barça cuando la situación podía empezar a ser crítica. Y la sensación es que ni se inmutó.

EL BARÇA NECESITARÁ DE MÁS ARGUMENTOS EN LA FINAL FOUR

Demasiados jugadores blaugranas pasaron desapercibidos. Saras confió el duelo, en especial, a cinco jugadores y es evidente que son pocos. Espero que en Belgrado ya se pueda contar con un Higgins imprescindible y el resto ha de dar más.