Laporta debe revertir el vestuario

El central top europeo que interesaría a Laporta y Koeman

Koeman echó en cara a la directiva no haber transmitido más confianza / Google

Joan Vehils

Joan Vehils

Hoy toca ganar. Bueno, en realidad en Can Barça siempre toca ganar. Ya dijo Laporta con acierto, que en el Barça no hay temporadas de transición. Y es que hay clubs que, por tradición, por historia o por lo que representan no pueden permitirse especular con los resultados. Digo esto, porque todas las personas vinculadas al club están obligadas a comportarse de manera modélica y ejemplar. Todos. Desde el presidente, sus directivos, sus asesores, los ejecutivos y, como no, los deportistas que visten la camiseta del Barça. Y eso no siempre pasa. A todos nos vienen ejemplos de determinadas actitudes, tuits fuera de lugar o declaraciones malsonantes. Esta misma semana se ha producido un hecho que demuestra que algo falla en las estructuras internas del club. Messi tuvo una buena idea que pudo acabar como el rosario de la aurora. Sorprende que nadie del club se enterara del asado que, de buena fe y con las suficientes medidas sanitarias, organizó el argentino en su casa. Leo lo controló todo y no pasó nada y la prueba es que al día siguiente todos se realizaron una prueba de antígenos y no hubo positivos. Sin embargo, no puede ser que el club no tenga los mecanismos suficientes para enterarse y que el propio presidente conozca por la prensa un acto, que por muy privado que sea, asiste toda la plantilla. Y no para prohibirlo, pero sí para ayudar a evitar sustos innecesarios.

Como tampoco podía pasar que todos los futbolistas supieran hace tres veranos que Neymar se iba al PSG y la directiva no tenía ni idea. En definitiva, no puede ser que el vestuario actúe a espaldas del club. El fútbol evoluciona, los presupuestos crecen, los futbolistas aumentan sus ingresos y algunos siguen viviendo ajenos al mundo real. Pasó con Bartomeu y no puede pasar con Laporta que ya tuvo un disgusto el anterior viernes por la ausencia de un jugador importante en un acto interno con un patrocinador. Eso sí, tras ganar la Copa del Rey, el presidente, Koeman y los capitanes llevaron juntos la Copa al Museo y ayer vimos a Piqué y Sergi Roberto en un acto de la Fundación. Quizá algo empieza a cambiar. En fin, que Laporta está obligado a revertir el vestuario. Revertir, por cierto, una palabra muy usada en campaña desde que se fichó a Reverter.

Reverter, el CEO que cargaba cajas

Cuentan por el Maresme que cuando el nuevo CEO, Ferran Reverter ejercía de director de MediaMarkt en Mataró no le caían los anillos y que el día de las ofertas sin IVA era el primero en cargar cajas de televisores de un lado a otro. Su esfuerzo concluyó convirtiendo esa tienda en la que más facturaba por metro cuadrado de Europa. Dice alguno de sus excolegas que Reverter es un tipo muy competitivo como Messi y que por eso ha llegado tan arriba. “No se conforma con un 3 a cero si puede meter 5”. Se nota que le aprecian y le admiran. Ahh! Y es muy culé. Viajó a las finales de París y Roma y en su vieja oficina de la tienda de Mataró todavía resuenan los gritos del día que allí presenciaron la final del Mundialito previo al Sextete.

Ahora, sus problemas se centran en cerrar el organigrama y cuadrar los números. Le preocupa el departamento de marketing tras la renuncia de Cinto Ajram. Le sustituye, Jordi Camps que ejercerá de Global Partnership Director tras anular su regreso a Hong Kong. Habrá más cambios. Respecto a la economía, Reverter fue muy sincero tras su primera reunión con Laporta. “Con estos sueldos es imposible cuadrar los números”. Tiene trabajo por delante, pero no le asusta. Solo le preocupa que no le dejen tomar sus propias decisiones.

Ingla y Soriano triunfan 

El que fuera vicepresidente del Barça con Laporta y ahora CEO del City, Ferran Soriano es uno de los ejecutivos del año. El City de Guardiola ganará la Premier y tiene opciones de conquistar por primera vez la Champions. Mientras, otro de los vicepresidentes de aquella época, Marc Ingla, es ahora la mano derecha del presidente y directivo del Lille francés que puede conquistar la Ligue 1 por delante del PSG. Pues eso, que mucho ha salido de aquella junta presidida por Laporta y que tenía como vicepresidentes a Rosell, Soriano, Ingla, Godall y Albert Vicens