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Opinión

Lamine vs Mbappé, Equipo vs ego, Barça vs Madrid

Lamine Yamal le ganó la partida a Mbappé

Lamine Yamal le ganó la partida a Mbappé

Desde hace algún tiempo todos los equipos de fútbol han igualado sus prestaciones en dos conceptos: la preparación física y la pizarra. Sobre lo primero, cualquier futbolista tiene hoy condiciones de atleta. No solamente nos referimos a futbolistas como Nuno Mendes, el lateral izquierdo de Portugal que el domingo pasado fue nombrado MVP de la final de la Liga de las Naciones después de marcar un gol y empequeñecer a Lamine Yamal, sino a futbolistas como Pedri, un prodigio técnico que es capaz de superar los doce quilómetros por partido. En el fútbol actual no hay otra salida porque aquello de que los delanteros atacan y los defensas, defienden, ha pasado a mejor vida. No existe un equipo campeón que no presione a muerte.

El segundo aspecto es la táctica. Los entrenadores han evolucionado de manera espectacular. Cada uno con su mirada, los técnicos de primer nivel dominan la pizarra para contrarestar el juego del equipo rival e, incluso, para proponer un fútbol de ataque. Aquello de orden en defensa e inspiración en ataque cada vez se ve menos, justamente porque el juego colectivo está anulando el éxito de aquellos equipos que pretenden ganar a partir solamente de la calidad de un futbolista. Es por eso que el Paris Saint-Germain ha barrido en Europa y que el Barcelona ha ganado todo lo ganable en la competición doméstica.

¿Es que Kvaratskhelia o Lamine Yamal no son estrellas? Por supuesto que lo son, quizás en el caso del jugador catalán, la que más brilla en el universo futbolístico. Por eso, que nadie se confunda ante lo que están leyendo porque el talento siempre va a ser el factor diferencial y por eso los grandes clubes siguen apostando y pagando mucho dinero por los futbolistas especiales pero como se vio el pasado sábado en la citada final cualquier equipo necesita de mucho más que un artista para conseguir los objetivos. De hecho, los equipos campeones ya no juegan para sus estrellas sino que son los cracks los que se ponen al servicio de sus compañeros. Luís Díaz se ha hartado de correr para su Liverpool, como Doué o incluso Dembélé, para el PSG. O Kane y Lukaku, que ya van teniendo una edad, en el Bayern y Nápoles, ambos campeones en sus países.

La realidad es tan tozuda que hasta Florentino Pérez ha decidido cambiar el plan de su Real Madrid campeón de Europa que la temporada pasada fichó a Mbappé y que se estrelló contra su propia soberbia. Es tan evidente que el francés no corre hacia atrás, que a Vinicius solo le interesa su brillo personal y que Rodrygo se ha cansado de ver el pasotismo de sus compañeros que hasta Florentino Pérez ha decidido saltarse el glamour de su alfombra blanca y ponerse el chándal a las órdenes de Xabi Alonso. Su duelo con Hansi Flick promete una gran temporada de fútbol.