LaLiga no interesará a nadie

Florentino Pérez no tiene claro el Plan B

Florentino Pérez no tiene claro el Plan B / AFP

Ivan San Antonio

Ivan San Antonio

"Con el VAR hubo un antes y un después de la llamada de Florentino a Rubiales". La frase es del presidente de LaLiga, Javier Tebas, que vela por los intereses de los clubs de Primera y Segunda, entre ellos el Real Madrid. La acusación es gravísima, pero su autor se quedó a medias porque no explicó qué pasaba antes y qué está pasando después. De hecho, sus palabras no han tenido respuesta por parte del presidente madridista, ni públicas ni privadas.

Tebas insinuó, pero no denunció el expolio al que el Real Madrid está sometiendo al resto de clubs que disputan la competición, expoliando, de hecho, a la competición en sí, convirtiéndola en una parodia, una broma de mal gusto que acabará por no despertar ningún tipo de interés. Los blancos ganaron el último título porque, tras el confinamiento, el VAR pasó a ser una herramienta usada para corregir, a favor, los errores del equipo de Florentino, no los arbitrales. LaLiga es un producto menor, un espectáculo dantesco cuando se juega con las cartas marcadas. El campeón se conoce antes de arrancar y eso frustra a los clubs y a sus aficionados.

Los damnificados crecen semana a semana y siempre gana el mismo. El VAR y quienes lo gestionan se burlan de quienes pagan por ver el fútbol por televisión y de quienes lo harán por acudir a los estadios. De los españoles, pero también de los de aquellos países que, si nadie lo remedia, dejarán de mostrar interés por esta competición. El fútbol es el mejor deporte del mundo por la imposibilidad de predecir sus resultados, porque el pez chico se come muchas veces al grande, porque David es capaz de tumbar a Goliat. Así es en cualquier competición menos en LaLiga, donde el fútbol es ese deporte en el que juegan once contra once y el VAR siempre ayuda al Madrid.