Joselu y Lucas Pérez, la referencia del Alavés

Los goles de Joselu y de Lucas Pérez han marcado el camino de la salvación

Los goles de Joselu y de Lucas Pérez han marcado el camino de la salvación / EFE

Pichi Alonso

Pichi Alonso

ESTADOS DE ÁNIMO Sin duda alguna la manera de afrontar este último compromiso liguero será totalmente diferente en un equipo y otro. Mientras que para el Alavés será un partido de celebración por conseguir el objetivo de la salvación -5 temporadas seguidas en 1ª división-, para el Barça será un partido de penalización. Anímicamente tocados los blaugranas, deberían presentar un once titular con muchas ausencias de hombres importantes, pero la complicada situación –cuestionado el técnico, enfadado el crack- tampoco puede permitir poner en liza un once poco competitivo con el riesgo de llevarse otra derrota, que podría tener mas consecuencias negativas.

El Alavés ha llevado a cabo una temporada rara, extraña, pues de hacer una primera vuelta muy buena, entró en una dinámica muy negativa, encadenando 6 derrotas consecutivas, algunas de ellas con goleada incluida, yendo descaradamente de más a menos, hasta el punto de intranquilizar a sus dirigentes y tomar la decisión de cambiar de técnico, a pesar que nunca estuvo el equipo en posiciones de descenso. Es un encuentro complicado de jugar mentalmente para los jugadores azulgranas, pero deben ir pensando que la temporada no ha finalizado y les espera mejorar para afrontar la Champions y poder dar una alegría a sus seguidores, por difícil que parezca en este momento.

GARANTIA DE GOLEADORES El Alavés no es ni mucho menos un equipo goleador, pero sí tiene a dos jugadores que garantizan una cifra de goles bastante importante para un equipo que aspira a mantenerse en primera división. Pocos, por no decir ninguno de los conjuntos que luchan por salvar la temporada, tienen en sus filas una pareja como Joselu y Lucas Pérez en el ataque, que con 11 goles para cada uno, garantizan prácticamente el 80 por ciento de goles que consiguen los que luchan por eludir el descenso. De perfiles diferentes, Joselu mas referencia, juego aéreo para las prolongaciones, y Lucas mas movilidad y buen disparo, se complementan perfectamente. Ramón Muñiz apostó por Burke como acompañante, buscando mayor velocidad y profundidad, aunque mucho mas impreciso en la finalización que Lucas Pérez.

La apuesta táctica es muy clara, un 4-4-2 clásico, con dos extremos en las bandas del centro del campo –Edgar y Rioja o Aleix Vidal- y dos medios centros-Manu Garcia y Pina o Camarasa con Fejsa- más de contención los primeros que los segundos. Defensa de 4 con dos centrales fuertes –Laguardia Magallan, pues Ely es baja por sanción-, en la que Laguardia se ha convertido en el líder defensivo, y con dos laterales Martin o Tachi por derecha y Adrián Marín o Duarte por izquierda. En la portería ha mantenido a Roberto que se hizo con el puesto en el momento de la sanción de Pacheco. Un conjunto muy peligroso a balón parado, sobre todo en las faltas laterales y los corners – Laguardia, Magallan, Joselu, Camarasa,... Al final, será un partido sin más aliciente en Mendizorroza en una última jornada de Liga entre dos equipos que no se juegan nada pero que llegan con mentalidades muy diferentes, y también con objetivos opuestos al iniciar la temporada.