Opinión

El "Jardinero" se queda el chalet

Xavi Hernández, en el clásico

Xavi Hernández, en el clásico / Valentí Enrich

En la lista del odio del madridismo, Xavi Hernández se mete en el “Top Five” sin aparente esfuerzo. Con Guardiola al frente, iconos como Piqué, Messi o Luís Enrique comparten honores con el “Jardinero”, como le apodan con rabia en la capital. Una vez, le afeó a Mourinho que mandara no cortar el césped en la semi de Champions del 2011. Les ganó, como casi siempre. Sentó cátedra en Chamartín llevando la bandera del estilo que sometió al Real Madrid, apoyó el derecho a decidir y rechazó la represión del referéndum del 1 de Octubre. Non grato.

A Xavi, ya como entrenador, se le recibió en Madrid entre el miedo y las mofas. Miedo por la reedición de otra época como la de Pep; y mofas propias de quienes jamás soportaron su hegemonía en el campo ni sus frases fuera de él. Eso se vio en octubre. “Xavi quédate”, le cantó el Bernabéu entero. La derrota en Liga (3-1) dejó al Barça tres abajo y a su técnico cerca del paredón. “Aquí manda el Madrid”, tituló la prensa afín. No vieron venir el sunami.

Xavi le le ha metido a Ancelotti 15 puntos en una vuelta, le ha ganado tres veces - ya 5 de 7 Clásicos - y le ha superado de todas las maneras. Con un rondo gigantesco (Supercopa), defendiendo en bloque bajo (ida de Copa) y dominándole anteayer con la presión alta y en el intercambio de golpes. El escarnio, casi sin Pedri ni Dembelé y con S. Roberto y Kessié, dos secundarios, está siendo antológico. Carlo no supo perder: dudó de un fuera de juego claro y puso el orgullo por delante del resultado. Lo mismo hizo Hernández en Arabia, cuando perdió en la prórroga. Se le mató.

Xavi debe ponerle el lazo al año, remar para mejorar en Europa y alicatar un Barça que anda lejos de ser redondo. Pero el “Jardinero” le ha limpiado el chalet a Carletto y si le supera en Copa, le dejará a un derrota en Champions de su segundo adiós. Sí, había entrenador. Y lo que es más importante: nos representa.