La identidad por encima de todo

Xavi, durante el partido ante el Cádiz

Xavi, durante el partido ante el Cádiz / Valenti Enrich

Gerard López

Gerard López

La eliminación contra el Eintracht y la no menos dolorosa derrota de anoche ante el Cádiz pueden llevar a la sensación de que el Barça ha bajado en solidez y en rendimiento. También, claro, a nivel de resultados. Al equipo azulgrana quizás le esté ya pesando la sobrecarga de haber tenido que ir tanto a remolque y durante tanto tiempo. Muchas jornadas en las que no se ha permitido bajar ni un ápice la concentración para escalar puestos en la clasificación y con una muy buena dinámica.

El ‘efecto Xavi’ se ha notado, y de manera crucial, en este Barça, pero es cierto que, a veces, durante este larguísimo tiempo teniendo que mantener el nivel, es normal un bajón, que ha coincidido, desafortunadamente para los intereses europeos del equipo, con la eliminación ante el Eintracht. Lo del pasado jueves fue un palo, además del aspecto social, a nivel deportivo, y el KO de anoche fue también muy duro, pero este equipo debe levantarse y pelear hasta el final. 

Pese a la derrota ante el Cádiz, la lucha por entrar en Champions debería estar más o menos controlada. El jueves hay un partido importante en Donostia ante la Real Sociedad y también hay que tener en cuenta que el Betis, otro rival directo, puede tener la cabeza en la final de la Copa del Rey. El Barça tiene que asegurarse la posición entre los cuatro primeros y hay que terminar con buenas sensaciones para ir asentado las bases de la próxima temporada. Este es el objetivo de los últimos partidos: hay que seguir luchando en cuanto a clasificación y siempre con una idea de juego. Y como dice Xavi, siendo fiel al estilo. 

Se podrá perder o incluso se podrá tener una época más o menos dubitativa, como la de ahora, pero el estilo no se discute. Es una de las premisas que Xavi Hernández ha tenido muy clara desde el principio. El equipo ha sido siempre fiel, tanto en el dibujo como en el estilo de juego, y con el sello de un entrenador que ha venido a mitad de temporada para levantar al Barça.

El compromiso de los jugadores, el crecimiento de los jóvenes, la adaptación rápida de los fichajes de invierno, la recuperación de Dembélé... son factores que ha aportado el técnico azulgrana, con la potestad total para montar la plantilla de la próxima temporada y seguir creciendo en la idea. 

No hay que olvidarlo ahora que se han perdido dos partidos. El equipo azulgrana ya ha demostrado que puede luchar otra vez con los grandes rivales, como hizo en el Santiago Bernabéu, y por eso, la exigencia será mayor el siguiente curso. Se le pedirá optar a los títulos.