Hoy, mejor no hacer rotaciones

Ernesto Valverde, durante la entrevista concedida a Barça TV

Ernesto Valverde, durante la entrevista concedida a Barça TV / sport

Joan Mª Batlle

Joan Mª Batlle

Estas cosas, mejor escribirlas antes del partido, no sea que luego te acusen, y con razón, de ventajista por conocer el resultado del encuentro: Hoy no es el mejor día para hacer rotaciones. Reconozco que entramos en una fase con una sobrecarga brutal de partidos, metida ahí la Copa con calzador, pero antes de lanzarse a pedir descansos y que algunos suplentes tomen ciertos relevos pensando que en febrero/marzo hay que tener a los cracks finos para la Champions, es obligatorio analizar la situación y el calendario actuales. Hay partidos que son estratégicos, que hay que afrontar con perspectiva, y este, sin duda, lo es. 

NADA DE FACILIDADES. Miren, hoy venimos de unas vacaciones de dos semanas, luego no hay nadie cansado. Hoy, el Barça juega en campo contrario, ante un Getafe que está dando muestras de peligrosidad en todos sus partidos. Y, sobre todo, hoy sus máximos seguidores, que son el Atlético y el Sevilla, no el Madrid, se enfrentan entre sí, lo que quiere decir que sólo uno sumará de tres o, lo que aún sería mejor, puede que los dos pierdan dos puntos. O sea, que lo que hoy toca es asegurar los tres puntos y salir más fuertes en el liderato tras una jornada que beneficia al equipo de Valverde. Si hoy el Barça gana en Getafe, en el peor de los casos solo tendrá cerca al Atlético. O al Sevilla, ya no tanto, a cinco puntos o aún más lejos a los dos. Y al Madrid a siete puntos... o más. Claro, que para ello hay que ganar al Getafe; de lo contrario, el Atlético podría incluso empatarle y el Madrid reengancharse a la lucha. No estoy cargándome las rotaciones, y menos este año que parece que hay fondo de armario, estoy diciendo que habrá mejores ocasiones para rotar. El jueves, por ejemplo, en la Copa, que siempre deja una segunda oportunidad, y luego dos partidos en casa, teóricamente asequibles ante el Eibar y el Leganés. Claro que en el fútbol no hay nada seguro, pero, por lo menos, si algo no sale bien que no sea por dar facilidades.