Hay que respetar y honrar a Messi

Leo Messi celebrando uno de los cuatro goles que anotó el 22 de febrero en el Camp Nou contra el Eibar (5-0)

Leo Messi celebrando uno de los cuatro goles que anotó el 22 de febrero en el Camp Nou contra el Eibar (5-0) / EFE

César L. Menotti

César L. Menotti

El Barcelona es la segunda casa de Lionel Messi, la primera es la que conformó con su mujer Antonella en Casteldefelds. Pero como en cualquier casa tiene que existir una relación afectiva entre quien la dirige, en este caso la junta directiva del club Messi. Sino  fuera así, la convivencia por más que contractualmente se ordene, es muy dificil. 

El Barcelona y Messi tiene bienes común que los hinchas culés y el equipo. La gente tiene un enorme reconocimiento para con eñ crack, lo aman.  Pero se necesita fortificar la relación entre quienes dirigen el club y quien lo representa como nadie, que es Lionel por todo lo que le ha dado. 

De los mejores del mundo el Barcelona tuvo a tres Johan Cruyff, Maradona y ahora a Messi. Ninguno se marchó bien del club. Seria ideal seguir fortificado una relación con Leo y que esa relación siga enmarcada en el respeto y el reconocimiento. Las  dos partes tienen obligaciones que se pactan desde una relación afectiva, y representan el sentir de un equipo con una historia de vida y social en Catalunya. Pero no siempre los dirigentes aprenden que Barcelona es más que un club.

A mí cuando me decían que el Barca era más que un club, no lo entendía del todo. Todos los clubes en los que había jugado en Argentina y en el exterior tenían una relación identitaria fuerte con su comunidad. Ni que decir de la selección argentina. Pero el Barca es especial. Y en esa relación que se construye entre los dirigentes y el jugador debe haber un marco de una palabra que no se traiciona, que es el respeto.

No convivo con la intimidad de esta relación aunque a Argentina también llegan las noticias de que la relaciones entre los jugadores y la dirigencia está atravesando algunos inconvenientes. No me voy a detener en eso porque no lo conozco en profundidad. Pero si puedo decir, que los dirigentes no deben olvidar que el club pertenece a los abonados y que los dirigentes solo son administradores. En la historia del club muchos han tenido que rendir cuentas de sus actos. Un club como el Barca no puede privarse de la relación profunda con su gente, no puede desconocer el sentimiento del hincha. Los dirigentes se pueden equivocar en elegir al entrenador, en los fichajes, el equipo puede errar un gol debajo del arco, pero el respeto debe ser la base de todo. Tiene que haber honestidad en la conducción. 

Una vez Núñez me preguntó si podía pasar a saludar a los jugadores por la concentración.¿Por supuesto¿, le dije. Pero desde ya no permitiría que el presidente se entrometíera en mis decisiones futbolísticas. Con Maradona era mi obligación como entrenador que cada uno ocupe el lugar que corresponde. 

No conozco las relaciones de los dirigentes con Messi, sé que él es feliz en su club, en la ciudad, y con su familia. El Barcelona  le permite cada año competir en un primerísimo nivel con aspiraciones para que él pueda desarrollarse. Un jugador no solo vive del dinero sino también de la alegría de la convivencia, y no veo que sea muy difícil llevarse bien con Messi, porque no pasa por ninguna frivolidad, entrena juega como un profesional. El tema económico no me interesa pero es innegable la influencia del crack en la historia del club blaugrana. 

Un club tiene dos poderes: la Junta Directiva y el otro el entrenador con sus jugadores.  La relación de Messi con el equipo depende de él con su entrenador y sus compañeros. 

El Barcelona tiene un equipo para aspirar a ser candidato al título que se proponga. Messi es una figura fundamental en sus aspiraciones. El club le ha confiado eso a Setién y a la dirección deportiva las modificaciones que deban llevarse a cabo. Es un muy buen equipo que ha sufrido derrotas sin merecerlas, lesiones, y despido a un entrenador a mitad de temporada, y que esta recomponiéndose. Pero es un plantel de primerísimo nivel.  

En relación a Messi lo único que seria imperdonable es no cuidarlo y no respetar su lugar, un lugar que él se ganó desde la confianza del club al que ha retribuido con honor y con gloria. La obligación del presidente y de la Junta es hacerlo sentir bien. 

Messi estuvo en Argentina hace unos meses, y la ultima vez que lo vi, lo vi muy feliz. Pero también es un profesional y un ser humano. Barcelona como dije es su club y su segunda casa. Pero puede pasar como en tu barrio, vivir fenómeno en tu casa, con todos los vecinos y un día un vecino no es lo que vos creías. Entonces o se va el vecino o te vas vos. Pero no creo que sea este caso. La directiva no debe tomar decisiones deportivas, para eso existe una secretaría técnica. Y es importante que dentro de esas decisiones se contemplen las necesidades de Messi.

Mi deseo es que él sea feliz, es muy fácil opinar desde afuera que es lo mejor para él. El sabrá que es lo mejor, no solo para si mismo sino también para su familia. 

Le ha dado al Barcelona todo, como muy pocos en la historia del club. Tiene una  relación increíble con los hinchas culés. Cuando una afición entona su nombre ¿Messi, Messi¿ como lo hacen en el Camp Nou, es algo muy especial, que solo le sucede a los elegidos. Como a Maradona en Napoli. Ese reconocimiento del público hacia el crack habla de la relación de cariño y respeto que existe entre ellos. Si vienen los resultados se descorcha champagne, cuando no vienen los resultados se buscan culpables. Que este parate sirva para recomponer relaciones y volver a la actividad con el equipo fortalecido en la relación con la dirigencia y entre ellos, en especial en lo humano que es la base de cualquier proyecto deportivo.