¿Y qué haría ahora Johan Cruyff?

Ronald Koeman y Johan Cruyff

Ronald Koeman y Johan Cruyff / @RonaldKoeman

Albert Masnou

Albert Masnou

Fue el propio Laporta quien anunció el fin de ciclo y que a partir de la próxima semana habría cambios. Pues llevamos ya cinco días desde que acabara la Liga o quince desde que el Barcelona decidió no pelear por esta competición y aquí todavía no ha pasado nada. No se han anunciado fichajes, aunque hay varios jugadores atados (todos ellos ya trabajados por la anterior secretaría técnica y por el anterior presidente), el entrenador es el mismo y está en un limbo y los jugadores esperan que les llamen para saber si forman parte de la ‘operación escabechina’. Hay expectación en conocer las decisiones de Laporta porque sería una manera de interpretar su proyecto, porque sería realmente saber cuál es el camino que decide tomar en su primer verano al frente del club. De momento, se está actuando mal con Koeman (y con Xavi Pascual o Andreu Plaza) y crece la sensación de improvisación de la junta en un club en el que cada día salen filtraciones de lo mal que está económicamente la entidad y del poco margen de maniobra del presidente. Es un lamento de la situación de crisis económica que corre el peligro de extenderse en lo deportivo y vete a saber si a lo institucional. Laporta está entre una situación complicada por querer cambiar un club sin recursos económicos y, por lo que parece hasta ahora, con pocas ideas. Y es en estos momentos cuando más se echa en falta una mano amiga, no interesada, capaz de aconsejar decisiones tan imprevisibles como geniales. Es ahora cuando Joan Laporta debe echar de menos subirse a El Montanyà, comer en su sensacional restaurante del campo de golf, sentarse al lado de Johan y atender a los consejos de un maestro que le guía en un mundo complejo como este.