Griezmann, siempre en mi equipo

Antoine Griezmann al final del Nápoles-Barça de la Champions 2019/20

Antoine Griezmann al final del Nápoles-Barça de la Champions 2019/20 / JAVI FERRÁNDIZ

Bojan Krkic

Bojan Krkic

Coincidí con Griezmann en el Hotel Sofía de Barcelona. Corría el mes de julio y no hacía demasiado que había llegado a la ciudad. Recuerdo cómo Antoine vino hacia mí y pese a que no nos conocíamos de nada, me dio un abrazo. Vi en aquel gesto la alegría de quien acaba de fichar por el Barça, vi a un tío feliz y agradecido, implicado y muy ilusionado. De hecho, me acuerdo mucho de aquel abrazo siempre que le veo jugar. 

No comentaré sus números porque hablan por sí solos (suma catorce goles y ha abierto diez veces el marcador). De hecho, creo que está rindiendo mejor de lo que podría esperarse en su primera experiencia como blaugrana. Sobre todo porque, cuando llegó, el ambiente en el entorno culé no era fácil de asimilar después de lo vivido el verano anterior con el documental ‘La Decisión’. Desde el primer día su fichaje estuvo envuelto en polémicas e, incluso, algún sector del Camp Nou le dedicó ciertos pitos. Había que adaptarse a todo ello. 

Pero lo ha hecho. Sin ser del Barça, sin haber crecido en La Masia, su implicación ha sido máxima y su actitud, ejemplar. Creo que los aficionados aún no son del todo conscientes del jugador que tienen en su equipo: un francés que aterriza en Barcelona y que, pese a que nadie se lo ha puesto fácil, no se ha quejado y ha seguido trabajando y sacrificándose por el club, pensando solo en el grupo. Ha jugado en la banda mucho más tiempo del que sería recomendable para un futbolista de sus características y nunca ha puesto mala cara. Al contrario. Me alegro de que ahora esté jugando más en su posición, para la que al fin y al cabo se le fichó. Donde rinde y puede crecer todavía más con sus características. Tras la lesión de Suárez,  el ‘nueve’ ya lo teníamos en casa. 

Estoy convencido de que aún puede dar mucho más y que acabará siendo así. Leí el otro día la entrevista que Pesic concedió a SPORT y creo que la clave, como relata el técnico, está en la paciencia. El resto ya lo está poniendo él, con goles, con sacrificio y, sobre todo, con compromiso.

Como el que demuestra hacia el club acudiendo, siempre que puede, a ver a la sección de baloncesto. No podemos pedirle a Griezmann que brille ya como lo ha hecho en sus anteriores clubs, donde su trayectoria le avala, pero sí podemos pedirle que siga esforzándose de la misma manera como lo está haciendo. O que, como es el caso, solo sea noticia por lo que le ocurre sobre el césped. No como pasa con otros futbolistas, que ocupan portadas por sus escándalos extradeportivos. Griezmann, al que no se le conocen fiestas ni carnavales, siempre en mi equipo.

Hay que ir al Bernabéu siendo muy valientes

El planteamiento táctico que propuso Zinedine Zidane en la primera vuelta de LaLiga en el Camp Nou es el que le pido al Barça el domingo en el Santiago Bernabéu. Setién tiene que ser valiente, como lo ha sido en los últimos años el equipo, consciente del potencial madridista, pero convencido de que es capaz de ir al ataque con garantías y haciéndose respetar.

Es imprescindible recuperar las buenas sensaciones que se perdieron con el planteamiento tan cauto que se llevó a cabo en la ida. Es necesario ir a buscar al Real Madrid y defender el liderato como siempre lo ha hecho el Barça, siendo más valiente que su eterno rival.

Clasificados para cuartos de la Concacaf

Aunque no pudimos pasar del empate sin goles, logramos hacer bueno el 2-2 del partido de ida para eliminar al Saprissa de Costa Rica en la Champions de la Concacaf. Ahora estamos ya centrados en el arranque de la MLS: en la primera jornada, recibimos en nuestro estadio al New England Revolution.