Griezmann le pone las pilas a Dembélé

Coutinho Dembélé

Coutinho Dembélé / sport

Manolo G. Crespo

Manolo G. Crespo

Ousmane Dembélé llegó en verano porque el Barça no pudo fichar a Coutinho y había que parar el golpe de la marcha de Neymar, pero la verdad es que el delantero francés tiene pinta más de un jugador de futuro,  con mucho por mejorar.

Y peor aún,  si no crece la temporada que viene, podría ser otra apuesta cara y fallida. De momento démosle tiempo al tiempo, sólo tiene 20 años. Valverde no le ha dado en la temporada los minutos que por su precio parecía que tendría, pero lo cierto que le faltan cosas, sobre todo en fase defensiva, aunque es verdad que tiene desparpajo, atrevimiento para encarar al rival y para que el Camp Nou disfrute en mucho partidos con su fútbol.

Tampoco tuvo suerte porque llegó y se lesionó, pero cuando le ves hacer cosas como la jugada que acaba con en gol de Coutinho ante el Villarreal, hay preguntas cómo ¿por qué no actuó en Roma? o ¿por qué no acabó el domingo jugando contra el Madrid?

Y además, mientras Dembélé intenta mejorar, tiene que escuchar que lo pueden ceder y sobre todo que el Barça fichará a Antonie Griezmann. El del Atlético llega 19 goles en Liga y Dembélé solo tres. Sabe, además, que Valverde prefiere jugar  con un 4-4-2, sabe que Messi y Suárez juegan seguro y que, aunque Coutinho ocupe la temporada que viene el puesto de Iniesta, él se tendrá que ganar un sitio con Griezmann y ¿quién se cree que si llega el delantero francés, no jugará? Ayer quedó claro que Griezmann le va a poner las pilas a Dembélé y, aunque en algunos minutos desapareció, dejó destellos de lo que buen jugador que puede ser:  Una gran jugada en el primer gol y un taconazo de lujo que acabó en gol, pero que fue anulado por fuera de juego de Coutinho. Y, por último, para poner la guinda, la gacela Dembélé, cerró la noche cos dos geniales carreras, la últimas desde el campo del Barça, que acabaron con dos goles, el último de vaselina.