Griezmann, ni con la ayuda de D10S

Griezmann, ante el Getafe

Griezmann, ante el Getafe / EFE

Xavier Ortuño

Xavier Ortuño

Koeman va de cara, analiza los partidos en la rueda de prensa y no duda en señalar a futbolistas si creen que merecen un toque y tras el Sevilla lo hizo con Griezmann: “Ha tenido dos oportunidades y, por su calidad, tenía que haber marcado en alguna de esas dos jugadas”.

A Griezmann no le sentaría muy bien el toque de atención del técnico holandés y cobijado con su selección con la que sumó goles le respondió: "Me encuentro bien porque el seleccionador sabe dónde ponerme y me beneficio de ello”.

Griezmann no recibió 'castigo' alguno por su frase, fue titular y jugó 80 minutos, además Leo Messi y él alternaron su posición por lo que no estuvo marginado en la banda y gozó de ocasiones jugando mucho más centrado. A Leo se le vió en más de una ocasión buscar al francés tanto para jugar el balón como para alternar su carril en el campo. 

Leo le puso en bandeja, sobre todo en la primera mitad, la oportunidad de convertir el partido en una reivindicación pero no lo supo aprovechar.

Su oportunidad llegó en el minuto 30, lo tenía todo para batir a Soria y marcar el gol que abriría el marcador... pero falló lo que no puede fallar un delantero del Barça y pasó de poder ganar un pulso y reivindicarse... a tener todos los dedos apuntando de nuevo.

A Griezmann no le ayudó que Dembélé firmara un partido para olvidar ni que Pedri brillara tanto y le diera un ritmo endiablado por el centro al juego, pero no dio ni un destello de ser el gran futbolista que alardea ser.

No se puede juzgar la carrera de un jugador por un balón que no manda al fondo de la red pero las oportunidades se le acaban a Griezmann y cada vez parece más lejos su sueño de triunfar en el Barça.