Un golpe durísimo a la ilusión azulgrana

El momento del gol de Santos Borré

El momento del gol de Santos Borré / AFP

Pichi Alonso

Pichi Alonso

Noche para olvidar en el Camp Nou: la derrota es un golpe durísimo para una afición que se había vuelto a ilusionar.

El Eintracht fue superior en la primera parte: salió muy decidido el equipo alemán, y a las primeras de cambio se encontró un inocente penalti de Eric Garcia, algo que vino de perlas al Eintracht y que penalizó al Barça, al que le costó enormemente intentar sobreponerse de ese golpe tan tempranero.

El equipo de Xavi intentó atacar sobre todo por la banda de Dembélé, pero el francés, que empezó muy activo, estuvo en todo momento bien tapado por la nutrida defensa alemana.

Las pocas veces que los de Xavi llegaron con peligro, generalmente hasta la línea de fondo para realizar el pase atrás, no encontraron rematador, en cambio los defensores alemanes despejaron todos los intentos de remate del Barça. Al equipo azulgrana le faltó precisión en el último pase. En cambio, los alemanes salían cada vez con más peligro, superando la alta presión azulgrana, que no era efectiva, dando mucha sensación de peligro, incluso Borré, poco acertado en la ida, logró un golazo por la escuadra que dejó hipnotizados a unos blaugranas que no creían lo que veían. Imprimió mayor velocidad a la circulación del balón en el inicio de la segunda parte, tuvo una clara ocasión `Auba', pero todo fue un espejismo y volvió a aparecer el temible Kostic para sentenciar.

No supo el Barça atacar una excelente defensa, que cortó todos los centros al área y que solo permitió dos disparos a portería de los azulgranas, excepción hecha del gol a última hora, un balance muy pobre para un ataque como el del equipo azulgrana.

LA CLAVE