Gavi, Nico, Ansu y Pedri marcan el camino a seguir

Pedri y Gavi, las grandes esperanzas

Pedri y Gavi, las grandes esperanzas / FCB

J.Mª Casanovas

J.Mª Casanovas

Más allá del derbi de anoche, el Barça tiene una necesidad vital: fijar una nueva política de fichajes seria, responsable y profesional. La crisis económica y las circunstancias del mercado obligan. El Camp Nou ha dejado de ser la meca de los futbolistas. Ya no está Messi, tampoco hay dinero para competir con los clubs/estado y los fondos de inversión que invierten en el fútbol como si fuera la Bolsa.

La mala experiencia de los últimos años debe servir de lección. Fichar supuestos cracks a precio de oro es un mal negocio. El pobre rendimiento de Coutinho, Dembélé y Griezmann demuestra que un equipo no se hace con talonario. Hay que volver a los orígenes, a la cantera. Soñar con Mbappé o Haaland en estos momentos está fuera de lugar.

Es hora de sacarse la careta, ser humilde y sincero. No se puede pensar que seguimos siendo ricos cuando somos pobres. Hay que ser realista, se inicia con Xavi un nuevo proyecto que requiere tiempo, paciencia y comprensión. Se fue Neymar, se fue Luis Suárez, se fue Messi y se ha ido Griezmann. Nada es igual, todo ha cambiado. Se ha perdido gol, prestigio internacional e imagen. A día de hoy el Barça ya no tiene estrellas mundiales ni hace el mejor fútbol. El socio, consciente de la problemática, sabe que viene una travesía del desierto de duración incierta. 

Hasta aquí el relato de una panorama que no será fácil ni cómodo. Pero no todo es negativo ni pesimista, hay motivos para el optimismo. En el Camp Nou crecen brotes verdes, una generación con talento y ambición. Jóvenes formados en La Masia que han tenido la oportunidad de su vida y no la han desaprovechado batiendo récords de precocidad. Son rayos de esperanza que luchan por la titularidad. Ellos son los únicos beneficiados de la crisis deportiva ya que su oportunidad ha llegado antes de lo previsto.

Han debutado por necesidad pero han demostrando que tienen madera para llegar lejos. Ansu Fati se pueda mirarse en el espejo de Messi cuando tenía la misma edad. Gavi y Pedri aspiran a jugar el papel estelar de Xavi e Iniesta en la pasada década. Nico tiene talento y fuerza para convertirse en el sucesor de Busquets. Araujo está capacitado para tomar el relevo de Piqué. Son jóvenes que despiertan ilusión y en los que confía Xavi como base de un equipo con futuro.

El camino a seguir está claro: continuar con la apuesta decidida por los jóvenes ya iniciada. El Barça no puede tirar más dinero con jugadores que no superan lo que hay en casa. Si falta un goleador de garantía, se ficha, pero prohibido contratar mas defensas extranjeros que no dan la talla ni jugadores que vienen a jubilarse. El triunfo de Xavi será armar un equipo joven que sienta los colores, tenga hambre por ganar títulos y recupere la ilusión de los aficionados. Está debe ser su hoja de ruta.