Ganas de volver a veros... pero con Haaland

Haaland ya se habría despedido del Borussia Dortmund

Haaland ya se habría despedido del Borussia Dortmund / Google

Lluís Mascaró

Lluís Mascaró

Hace un año, Laporta empezó a ganar las elecciones a la presidencia del Barça colgando una gigantesca pancarta en los aledaños del Bernabéu. El mensaje, provocador, no dejaba lugar a dudas de sus intenciones: “Ganas de volver a veros”. Una inequívoca referencia al Madrid y a los espectaculares triunfos logrados por el equipo blaugrana en el estadio blanco durante la primera etapa de Laporta como presidente. Aquella ingeniosa iniciativa (idea de Lluís Carrasco, jefe de campaña) enardeció a todos aquellos culés que recordaban el pasado glorioso del Pep Team. Laporta tiró de nostalgia para calmar el desasosiego de los socios ante la catastrófica gestión de Bartomeu. Y arrasó en las urnas. Lo que vino después, lo sabemos todos: la tremenda dificultad de hacer frente a una triple crisis deportiva, económica e institucional.

Hoy, Laporta se enfrenta a dos retos vitales para que, un año después de la famosa pancarta, su proyecto pueda empezar a rodar: la resurrección del equipo y la construcción del Espai Barça. El presidente ha puesto el equipo en manos del mejor entrenador posible, Xavi Hernández. Y el próximo domingo, pone a votación la financiación del nuevo Camp Nou en un referéndum telemático histórico. Laporta está convencido de que saldrá victorioso de ambos frentes, aunque también es consciente de las enormes dificultades de los dos objetivos. 

Xavi ha empezado la creación del nuevo Barça con un proyecto que solo puede ser a medio y largo plazo. Es imposible exigirle resultados de forma inmediata con la actual plantilla. Xavi se ha sentado en el banquillo del Camp Nou en las circunstancias más adversas. Y hay que agradecerle su valentía y su ilusión por liderar la profunda transformación de un equipo moribundo. Este Barça que se ha instalado en la mediocridad y la impotencia necesita mucho más que un gran técnico para ser otra vez un Barça campeón capaz de asaltar el Bernabéu.

Necesita una revolución en la plantilla. Y grandes fichajes. Tanto en este mercado de invierno (con Ferran Torres como prioridad absoluta) como en el mercado del próximo verano (con Haaland como gran y casi único objetivo). Pero para conseguir estos trascendentales refuerzos, se necesita mucho dinero. Algo que el Barça, ahora mismo, no tiene. Laporta, como hizo con la pancarta, deberá buscar alguna fórmula imaginativa que permita estas incorporaciones. Porque solo con una estrella como Haaland tendremos ganas de volver a ver al Madrid.