Ganar era lo único importante

Davies

Davies

Nacho Solozabal

Nacho Solozabal

EL PARTIDO DEL MIEDO Un auténtico sufrimiento. El Barça se encomendó, en el último suspiro, a un inspirado Hanga para ganar un partido de infarto. Había mucho en juego. La presión se cebó en la cabeza y en las muñecas de los blaugranas de una manera incomprensible para jugadores de tanta experiencia. Volvió Xavi Pascual a hacer su partido. Lograr dejar al Barça en 66 al final de los 40’ casi le da la victoria. No hubo manera de que los de Jasikevicius mandaran en la pista. Tan sólo en algunos instantes del segundo cuarto el Barça pudo correr y abrir una brecha en el marcador. Pero el Zenit tenía aprendida la lección, y volvió a dormir el encuentro en el tercer periodo dejando a los blaugranas en 10 puntos.

La defensa rusa fue inmaculada. Otra vez dejaron inéditos a los exteriores del Barça, no permitieron la circulación de balón, y supieron cerrar muy bien su canasta. Suerte de los tiros libres. Un comodín definitivo.También, de nuevo, jugaron sus ataques al límite de la posesión y cargaron el rebote ofensivo. Miedo, hasta pánico, se reflejaba en los rostros de los hombres de Saras conforme avanzaba el partido. No obstante, fuera como fuera, al final, empataron la serie. Y con eso basta, de momento.

BAJO MINIMOS No comprendo el bajo rendimiento de jugadores como Mirotic o Calathes en un duelo tan trascendental. Ante la enorme versión de Pangos, Calathes volvió a naufragar. Perdió muchos balones, no estuvo acertado, ni dirigió con éxito a los suyos. En los pocos minutos que Bolmaro estuvo en pista, el equipo estuvo más fresco en su juego. Por su parte, Mirotic pareció ausente en muchos instantes. Como si no quisiera el balón. Dos piezas tan importantes para el Barça deben mejorar de forma exponencial su aportación.

En general, el equipo estuvo lento de ritmo y de ideas. Suerte que un omnipresente Davies salió al rescate en el tramo final del duelo. Pero fue a base de esfuerzo en el rebote, ya que durante muchos minutos sus compañeros se dedicaron a jugar de manera individual y errática en vez de buscarle cerca del aro. Un gran error. El Barça deberá mejorar, cara a los dos partidos que vienen. Ahora toca reflexionar. San Petersburgo espera con muchos aficionados en la grada.

TIRO TRIPLE

Davies volvió a ser decisivo en el triunfo. Carácter, lucha y ambición. Características que acompañan a Brandin Davies en todos los duelos. Si bien Hanga estuvo sublime en los últimos segundos recuperando dos balones, el pívot aguantó solito al equipo durante los minutos clave del choque para poder llegar al final con opción.

FALTA TÉCNICA

El Barça no puede jugar tan presionado. Nadie duda de la enorme tensión que implica jugarse todo a una carta cuando se alcanzan los cuartos de final. Pero los jugadores blaugranas tienen una calidad y experiencia enormes. Por tanto, en Rusia tenemos que ver a un equipo totalmente diferente al que se ha visto enlos dos partidos en el Palau.