La foto más universal de Nadal

Nadal ayudando con las tareas de limpieza en Sant Llorenç

Nadal ayudando con las tareas de limpieza en Sant Llorenç / JORDI COTRINA.

Ernest Folch

Ernest Folch

La imagen brutal de Rafa Nadal sacando agua del pueblo arrasado de Sant Llorenç des Cardassar en Mallorca ha dado con razón la vuelta al mundo y ha suscitado todo tipo de teorías y comentarios. La foto es impactante porque retrata a una estrella mundial como a una persona absolutamente normal que reacciona con simplicidad ante una tragedia terrible que golpea de improviso el lugar en el que ha nacido, y que busca ayudar instintivamente a reparar los daños devastadores de una riada fatal. 

En un país en el que es imposible que algo no se critique, hay quien ha acusado al tenista de querer sacar rédito mediático del sufrimiento de sus conciudadanos, pero esta teoría de la conspiración fue desmontada ayer por el tío del tenista, Toni Nadal, que quiso dejar bien claro que se intentó precisamente que nadie supiera ni sacara fotos de la acción del tenista, precisamente para evitar esta interpretación malévola. Incluso ayer trascendió que algunos vecinos trataron de ocultar la identidad del tenista, algo que fue inevitable cuando corrió la voz de que uno de los mejores tenistas de todos los tiempos estaba achicando agua en un pequeño pueblo de unos pocos cientos de habitantes.

Independientemente de todas las interpretaciones que puedan hacerse, lo que ni siquiera sus críticos pueden negar es que el gesto de Nadal ha sido muy útil  y ha servido para situar a la conmovedora tragedia de Mallorca en los medios de todo el mundo, algo que facilitará la capacidad de recuperación de la zona cuando haya desaparecido de todos los noticiarios: hay tragedias cada día en muchos lugares del planeta pero en muy pocos se ve una imagen como la que protagonizó Rafa Nadal.

Su gesto ha provocado una cascada de reacciones de muchos deportistas, entre ellos de su eterno rival y amigo Roger Federer. La gran virtud de esta gran ‘volea’ mediática es que Nadal ha sabido salir de la burbuja donde habitan las grandes estrellas y ha aterrizado en el mundo real con la misma naturalidad con la que gana un gran slam. Quizás porque él sí que es consciente, a diferencia de otros, de que los deportistas también tienen que devolver algún día a la sociedad lo que esta les ha dado.