Fondos de inversión, ¿el futuro del clásico?

Barça y Madrid volverá a verse las caras este sábado en el Alfredo Di Stéfano de Valdebebas

Barça y Madrid volverá a verse las caras este sábado en el Alfredo Di Stéfano de Valdebebas / Javier Ferrándiz

Marc Menchén

Marc Menchén

Esta noche los ojos de medio mundo estarán puestos en un campo de fútbol que, si los nuevos drones de LaLiga alzan el vuelo, veríamos que se encuentra en medio de un descampado. Allí es adonde el Real Madrid ha llevado sus operaciones mientras no se permita el regreso del público a los estadios y es donde recibirá hoy al FC Barcelona. Un Clásico con una audiencia potencial de 650 millones de telespectadores que se disputará en una ciudad deportiva. La misma con la que Florentino Pérez rescató de la quiebra al club blanco en el 2000 y a la que ha destinado 215 millones de euros desde entonces.

Hoy el Barça se encuentra en una situación muy similar a aquella, parcialmente por culpa de la pandemia y por un modelo de gestión en el que se siempre se jugó con fuego. Miremos la gestión de recursos que hizo el Madrid tras la venta de Cristiano Ronaldo por 100 millones de euros y la que ya hizo el Barça tras recibir 222 millones con la salida de Neymar. Nuevos tiempos, nuevas fórmulas. A los blancos les salvó el pelotazo inmobiliario y los blaugranas, si Joan Laporta no lo cambia, ven la tabla de salvación en la venta de su negocio de entretenimiento a un fondo que aporte 200 millones. La nueva economía, 100% digital, donde el Barça claramente sí supera a sus rivales.

En pleno debate sobre si aún estamos ante la mejor Liga del mundo o si el liderazgo ahora recae en los clubes ingleses con sus multimillonarios accionistas, lo cierto es que los rankings son tozudos y continúan situando a los dos clubes como los más valiosos del planeta, con más de 3.300 millones de euros cada uno. La duda es si para mantener esa competitividad a futuro va a ser viable mantener una propiedad popular. La industria nos lleva hacia modelos híbridos y el soci bien haría de ir mentalizándose de que, en diez, quince o veinte años, el control del club acabará siendo compartido con grandes inversores.

La convergencia del fútbol con el entretenimiento y su crecimiento como industria empuja en esa dirección. Pero no dramaticemos: el Bayern Múnich tiene a Audi, Allianz y Adidas en su accionariado, y poco se puede dudar de su modelo asambleario o su capacidad para luchar por títulos. A fin de cuentas, ellos son los actuales campeones de Europa.

La 'mala leche' de los ciclos del patrocinio

El Barça se ha encontrado con la obligación de renegociar dos de sus principales patrocinios en plena pandemia. Rakuten y Beko seguirán hasta 2022, pero con un descuento del 50%. El Madrid tiene un año para saber si Emirates seguirá con ellos.

El futuro, digital, pero también muy experiencial

La gran ventaja competitiva del Real Madrid frente al Barça estará en el renovado Bernabéu. Los blancos lo tendrán listo la próxima temporada y, si ya hay público, ahí tiene más de 100 millones en nuevos ingresos. Al Camp Nou le toca esperar hasta 2024.